La presidenta de la federación de asociaciones de concesionarios Faconauto, Marta Blázquez, ha informado de que «los distribuidores han invertido más de 500 millones de euros en los últimos cuatro años» en España, a pesar de la bajada de las matriculaciones.
En este sentido, la directiva, que intervino en la sesión inaugural en el Congreso de la organización junto al presidente de Anfac, Wayne Griffiths; el de Sernauto, Francisco J. Riberas; y el portavoz del PP, Borja Sémper, calculó que, en este cuatrienio, se han perdido 1,3 millones de ventas, lo que significa lo mismo que haber dejado de hacer entregas a lo largo de un año bueno. Sin embargo, además del desembolso que han hecho los vendedores, han recuperado el empleo que había antes de la pandemia, con 161.000 trabajadores en el sector, de los que «el 97% es fijo».
Cambios en el Moves III, «en breve»
Uno de los grandes retos que debe afrontar la Administración es que se vendan coches eléctricos, para lo que es necesario que las ayudas del Moves III lleguen a los clientes «en el momento de la compra». Por ello, Blázquez ha aclarado que «estamos trabajando con Anfac y con el Gobierno y esperamos que en breve tengamos noticias de cómo sería» ese nuevo modelo. Asimismo, el presidente de Anfac apostilló que «espero que sea pronto».
No obstante, la ejecutiva ha pedido a los concesionarios que estén «tranquilos», porque «ya saben en todas la mesas de decisión que no se puede pasar de que lo que tengan que adelantar los clientes lo tengáis que adelantar vosotros y se está buscando el método de que las ayudas lleguen con vuestra intervención, pero no con vuestro soporte económico». Por lo demás, aludió a la necesidad de hacer más efectivo el programa, del que apuntó que deberían incorporarse todas las tecnologías, recordando a su vez el deseo de Faconauto de crear un Renove sin complejos y solidario en el que se sumen la totalidad de las mecánicas y vehículos seminuevos.
El reto de la nueva movilidad con espacios físicos
Blázquez, que comparece como presidenta de la agrupación por primera vez desde que fue elegida como sucesora de Gerardo Pérez el pasado julio, reivindicó la importancia del concesionario en un momento de transformación del sector, tanto por la forma de vender, con la llegada de la comercialización online y el amplio número de fórmulas de hacerse con un vehículo, como por las nuevas tecnologías que están apareciendo.
Por ello, destacó la relevancia del acompañamiento tradicional que han realizado los distribuidores en la compra, especialmente en una coyuntura en la que están arrivando las mecánicas eléctricas —«la nueva movilidad es demasiado seria para no encontrar respuesta en un estado físico», dijo—.
En cuanto a la irrupción de la electrificación, sostuvo que hay que empezar a transmitir mensajes positivos, al tiempo que solicitó el mantenimiento de las etiquetas de la DGT tal y como están y la aceleración en la puesta en marcha de los planes de puntos de carga; además, pidió desregulación en el entorno de la empresa, lo que ayudará a mejorar y lograr rentabilidad.
Unión marcas y concesionarios
Por su parte, Wayne Griffiths hizo hincapié en la unidad que vive el sector y subrayó el rol central del concesionario en el futuro de los fabricantes, poniendo como ejemplo el rápido crecimiento de Cupra, firma que comanda, obtenido gracias a una red sólida.
Asimismo, se refirió al momento disruptivo que vive la automoción —«no es una evolución ni una transformación», declaró—, en el modelo de venta y la tecnología. Por ello, solicitó el acompañamiento de las administraciones con planes de ayudas eficientes, insistiendo en que los actuales están bien presupuestados pero que los incentivos no llegan.
Finalmente, reivindicó la importancia de la industria del automóvil, donde España es el segundo productor a nivel europeo, y aludió al peligro que tiene Europa de perder la carrera por el eléctrico con Estados Unidos y China, por lo que entiende que la solución no es prohibir, sino incentivar el mercado para lograr esa mejora de ventas.
460 fábricas españolas de componentes por el mundo
Por su parte, el presidente de los fabricantes de componentes de Sernauto anunció que ya hay 460 fábricas de proveedores españoles en el mundo y 1.000 empresas en nuestro país que suministran piezas a los constructores de coches. Estas compañías facturan alrededor de 37.000 millones de euros anuales y dan empleo a alrededor de 330.000 personas.
Así, el también responsable de Gestamp señaló que la cadena de valor es muy potente, pero están afrontando desafíos muy fuertes, a la vez que volvió a incidir en que tienen que afrontar inversiones muy altas, cuando las cuentas de resultados no están tan bien —aunque este no es el caso de CIE Automotive y de su propia empresa que registraron unos balances récord en 2023—.
Por ello, pidió a la Administración apoyo financiero «ahora, no dentro de unos años», porque entonces será tarde.
«No se entiende el desarrollo económico y social sin el coche»
Por último, el portavoz del Partido Popular, Borja Sémper, aseguro que «el desarrollo económico y social de España no se entiende sin la palabra coche». Además, subrayó que «responden a una necesidad humana que no va a desaparecer».
Con esas bases, ha matizado, podemos debatir sobre cómo se afronta la descarbonización en el sector de la automoción. Algo que, a su juicio, se consigue «construyendo normativas justas que aporten seguridad jurídica» e incentivando fiscalmente para que el consumidor quiera cambiar de coche.
Tras ello hizo referencia al plan del automóvil que había elaborado el PP de cara a si Alberto Núñez Feijóo era presidente, y que presentó el político gallego en el pasado congreso anual de Faconauto, un asunto que se les «ha atragantado», ironizó.
