La ministra británica de Empresa y Comercio, Kemi Badenoch, ha afirmado que el Reino Unido y la Unión Europea anunciarán «pronto» una solución sobre las normas comerciales posteriores al Brexit. Las declaraciones, realizadas durante una entrevista para Bloomberg, llegan una semana después de que varias marcas automovilísticas advirtieran a Reino Unido sobre el cierre de sus fábricas en caso de que no se reformara el pacto.
El miércoles de la semana pasada, Stellantis urgió al Parlamento británico a ampliar las condiciones actuales del acuerdo sobre el abastecimiento de piezas hasta 2027, en lugar del cambio previsto para 2024. En caso de no abordarse la situación, el consorcio avisó sobre el cierre de sus dos fábricas y la pérdida de miles puestos de trabajo. Por su parte, Ford y el grupo Jaguar Land Rover (JLR) también pidieron que se renegocien los términos.
El pacto alcanzado con la UE tras la salida del Reino Unido consiste en que el 45% del valor de un eléctrico debe proceder de Reino Unido o de la propia Unión Europea a partir de 2024 para evitar un 10% en aranceles —actualmente, opera un 40%, en un sistema aplicable en ambos mercados—.
Siguiendo la misma línea que el grupo galo, Ford solicitó que se retrasen los requisitos comerciales de la UE posteriores al Brexit sobre las normas de origen para los vehículos eléctricos, y aseguró que esta ley solo penalizará a los clientes que deseen ser sostenibles con el medioambiente. JLR, por su parte, lo calificó como una norma «poco realista y contraproducente».
Urgen cambios en el acuerdo
Durante la entrevista, la ministra insistió en que no se trata de «un problema del Reino Unido, sino de la UE y el Reino Unido», y que «se aplica en ambos sentidos» —no obstante, Europa lo tiene más fácil a ser un mercado mucho más extenso—. Además, también añadió que el acuerdo del Brexit se renovará en 2025, y sugirió que deberían incorporar algunos cambios significativos debido a los actuales acontecimientos mundiales, como la guerra en Ucrania. «Muchas de las cosas que hemos puesto en marcha no funcionan teniendo en cuenta todo lo que está ocurriendo», dijo, «tenemos que ser lo más ágiles posible».
El director ejecutivo de la Sociedad de Fabricantes y Comerciantes de Motores, Mike Hawes, declaró que «hay que encontrar rápidamente una solución pragmática», y añadió que Reino Unido necesita «urgentemente una estrategia industrial que cree condiciones de inversión atractivas». Las reglas post-Brexit son parte de una creciente lista de desafíos que enfrenta la industria automovilística en el país británico, donde la producción de vehículos disminuyó un 10%.
Ante esta situación, el antiguo director de operaciones de Nissan y ex consejero delegado de Aston Martin, Andy Palmer, dijo — según declaraciones recogidas por Automotive News Europe — que los fabricantes de automóviles británicos se están viendo perjudicados por la «falta de acción» del Gobierno, pero pueden recuperar competitividad si dependen menos del comercio con Europa y miran en cambio a países como Estados Unidos o China.