Después de suprimir el permiso de superar en 20 kilómetros por hora para adelantar en vías convencionales, en marzo de 2022, los accidentes con víctimas se han reducido en un 6,1%. Así lo refleja «Los conductores españoles ante el adelantamiento en carretera convencional: accidentalidad y percepción», presentado hoy por la Fundación Línea Directa. Asimismo, el estudio muestra que «en un choque frontal a 100 km/h hay más de un 90% de posibilidades de morir. Por ello, reducir la velocidad al adelantar ha demostrado ser positivo para luchar contra la mortalidad en carretera». En este sentido, se ha logrado disminuir en un 8,5% el número de fallecidos en este tipo de vías y en un 9,6% los heridos graves, ha informado la Fundación durante la rueda de prensa mantenida de forma telemática.
Poco respaldo social
A pesar de estos buenos datos, la Fundación también realizó una encuesta a 1.700 españoles, para luego realizar la ponderación apropiada (con un margen de error de entre el 2,37 y 3,1%). En este sentido, indican que hay 13,6 millones de conductores (49%) que reconocen que han adelantado alguna vez sobrepasando los límites de velocidad. Además, hay 8,3 millones que lo han hecho con una línea continua de por medio. De esta forma, no sorprende que apenas un 19% diga estar conforme con la nueva normativa. Adicionalmente, el 46% asegura que no la cumplen y el 54% no cree que vaya a reducir las cifras de accidentalidad.
Asimismo, el informe se ha realizado utilizando los atestados de accidentes de entre los años 2013 y 2022 en carreteras convencionales. De esta forma, otro de los datos recogidos es el perfil más común del conductor accidentado: hombres (82%) de entre 30 y 45 años (33%) que conducen un turismo (81%). Aunque también apuntan a que uno de cada tres va en motocicleta.
Los lugares más peligrosos de España
En cuanto a Comunidades, Baleares y La Rioja, ambos con un 4,8%, registran una mayor proporción de accidentes por adelantamiento, seguidas de la Región de Murcia, con un 4,4%, muy por encima de la media española, que se sitúa en el 2,5%. Por el contrario, Cataluña (0,5%), la Comunidad de Madrid (1,4%) y el País Vasco (2,2%) se sitúan por debajo de ese promedio nacional.
En cuanto a los lugares más peligrosos de España, el informe destaca los tres tramos de carretera convencional con más fallecidos. Estos se encuentran en la N-232 (Km 204-221, Zaragoza), en la N-230 (Km 135-139, Huesca) y en la TF-66 (Km 1-9, Tenerife). Le siguen la EI-700 (km 2-3, Ibiza/Baleares) y la N-340 (Km 77-92, Cádiz). Asimismo, indican que a pesar de que la casuística depende de cada localidad, lo que sí comparten todos es la mala visibilidad existente.