La crisis de los chips, que ha obligado a EEUU y a Europa a mover pieza para acabar con la dependencia asiática, golpea de nuevo a las plantas de automoción españolas, forzadas a nuevos ERTE.
ERTE en Renault
La falta de piezas, que hasta ahora había hecho que la planta de cajas de cambio de Sevilla tuviese que aprobar un ERTE de 50 días hasta el 30 de junio, no se va a poder afrontar, como en su momento también se buscó en el centro andaluz, con una ampliación de la bolsa de horas hasta menos 40 días en Valladolid y Palencia.
Después de pactar el aumento de la flexibilidad el 9 de marzo, y ante la previsión de que se consumiese a mediados de abril, la empresa ha acordado un expediente en ambas instalaciones hasta el 30 de septiembre, afectando a un máximo de 9.163 empleados y con las mismas condiciones de las últimas regulaciones.
En las factorías vallisoletanas de vehículos y de motores se han fijado hasta 32 y 31 jornadas, respectivamente, frente las 39 de la palentina. Esta incidencia responde a una previsión de parar en los tres centros 33, 31 y 39 días hasta finales de septiembre.
Seat busca la recuperación
La factoría de Martorell dejará de aplicar el ERTE —uno de los primeros en automoción por este problema— a finales de mayo, un mes antes de su vencimiento, para poder activar el corredor de vacaciones y contratar personal con el fin de trabajar en agosto en la Línea 2 (León y Formentor) a dos turnos.
Para recuperar también producciones, planteó inicialmente que se operase la última semana de ese mismo mes en la 1 (Ibiza y Arona) y la 3 (A1), lo que fue rechazado por los sindicatos, que defienden, en su lugar, que ambas cadenas mantengan más tiempo su cadencia actual cuando se deje de aplicar el ERTE volverían a sus números anteriores más bajos—, cumpliendo así con los pedidos previstos.
Stellantis Madrid, último ERTE en la automoción
A pesar de que durante el mes de abril la planta de Villaverde ha activado los sábados 10 y 24, a dos turnos, y el 17, a uno, y en varios días (13, 14, 15, 20, 21, 22, 27 y 29) la novena hora —y se prevé que en mayo siga unos derroteros parecidos—, la compañía ha decidido aprobar un ERTE de 45 jornadas ante la previsión de que en los tiempos venideros se complique el suministro de semiconductores.
No obstante, esa cifra, que se aplicará del 13 de abril al 31 de diciembre de 2021 y afectará a los 1.177 empleados, supone menos de los 60 días de paro planteados inicialmente, según fuentes consultadas por La Tribuna de Automoción.
Asimismo, Stellantis garantizará hasta el 80% del salario en tablas más el complemento individual, no afectará a las vacaciones y no incluirá en el expediente a las personas que tengan contratos temporales o a tiempo parcial, a la vez que se protegerá a los que estén cerca de la jubilación.
Stellantis Zaragoza, otro ERTE en la automoción
El centro de Figueruelas es uno de los que está sufriendo con más rigor la ausencia de chips. Además de haber tenido que dejar de producir las noches del jueves 15, domingo 18 y el 16, 19, 20 y 21 al completo, que se suman a los 24 días en los que ya había tenido problemas de piezas, ha propuesto un ERTE de 50 días, que afectará solo al personal de oficinas.
El expediente se extendería del 1 de mayo al 31 de diciembre.
Goteo de paros en Stellantis Vigo
Con el ERTE de hasta 60 días entre el 5 de abril y final de año aprobado para un total de 3.643 empleados, la planta ya ha tenido que parar este mes el turno de noche del 15, todos los equipos del 16 y el fin de semana del 17 y 18 en ambos sistemas. Estas desconvocatorias se han asumido por casi toda la plantilla con la flexibilidad que todavía tiene de margen.
