La compañía ha confirmado, durante su Conferencia de Medios Anual, que el plan Accelerate ya está dando sus frutos, alcanzando unos beneficios netos de 14.843 millones, un 78% más que los 8.334 millones del ejercicio anterior y un 11,22% superior a los 13.346 de 2019. Unas cifras especialmente reseñables si, además, se tiene en cuenta que ha habido una contracción en el número de ventas con 4,9 millones de unidaes, un 8% por debajo de los 5,3 millones de 2020.
Además, se ha obtenido un cash flow neto de 212 millones, un 138% más interanual respecto a los 89 millones del ejercicio previo, y un retorno operativo de ventas que ha crecido hasta el 3,3%, 2,8 puntos porcentuales por encima del 0,5% del periodo anterior.
Para alcanzar estos registros, la marca alemana ha rebajado sus costes fijos 1.000 millones a los registrados en 2019, al mismo tiempo que ha continuado invirtiendo en algunas de las cuestiones que más relevancia tendrán en el corto y medio plazo. En concreto, VW ha anunciado que destinará 18.000 millones a la e-mobility, a la tecnología híbrida y a la digitalización de aquí a 2026.
La marca, además, ha querido destacar especialmente su desempeño en el continente americano, donde se han generado beneficios por primera vez en siete años. “En Norteamérica y Sudamérica hemos modificado nuestro portfolio para adaptarlo a las necesidades de su mercado, disminuyendo los costes fijos y ajustándolos a la producción local”, ha señalado el CEO de la entidad, Ralf Brandstätter, antes de añadir: “Estas regiones han alcanzado una rentabilidad constante y tienen sólidos planes de futuro para mejorar su competitividad aún más en los próximos años”.
Durante el último ejercicio, VW ha batido su récord de ventas de electrificados en todo el mundo, con más 369.000 unidades, un 73% más que las 228.900 de 2020, de los cuales 106.000 fueron enchufables (+33%) y 263.000 eléctricos puros (+97%). El constructor lanzó tres nuevos modelos: el ID. 4 y el ID. 5, así como el ID.6, este último solo para en China.
Positividad y cautela para 2022
Respecto a las previsiones para el presente año, la marca ha querido ser cauta, ya que, como ellos mismos han reconocido, todavía sigue habiendo confinamientos en Asia y una importante falta de semiconductores que están provocando paradas en sus plantas, aunque confían en poder recuperar ese tiempo incrementando la productividad en el corto plazo. Del mismo modo, Brandstätter ha señalado que la guerra en Ucrania tendrá un serio impacto en la cadena de producción.
A pesar de todo ello, esperan que sus resultados sean igualmente positivos, gracias a su apuesta creciente por los eléctricos, siempre y cuando haya chips suficientes para avanzar en esa dirección. Un camino que VW sigue transitando con el lanzamiento del ID. Buzz, cuya preventa se abrirá en mayo, con fechas estimadas de entrega para otoño. También ha adelantado que trabajan en un sistema de suscripción —con especial mirada a los usuarios más jóvenes—, ya que, como el CEO de la compañía ha señalado, fidelizar nuevos clientes es una de las prioridades actuales del grupo.
Además, para 2022, la compañía ha confirmado que espera hacer crecer su retorno operativo de ventas a un 4% —y 6% de cara a 2023— además de copar el 55% de las ventas de EV en Estados Unidos a lo largo del próximo ejercicio.
