El presidente de Anfac, Josep María Recasens, ha calculado que «en 2030 el vehículo eléctrico va a emitir menos de un 70% de la huella de carbono de uno de combustión». No obstante, ha admitido que es más caro porque estamos en la primera ola real del VE y «los constructores aún no hemos ofrecido coches en el entorno de los 25.000 euros para que el ciudadano pueda acceder» a ellos.
Además, el también vicepresidente de Estrategia y Desarrollo de Negocio del Grupo Renault ha alertado de que «nunca el sector del automóvil en Europa ha hecho frente a tantos retos de forma simultánea». Así, enumeró «la descarbonización; digitalización; volatilidad tecnológica, de la demanda y de los precios de los vehículos; escasez de materias primas y cambios en los costes de las mismas».
Durante la entrega de la IV edición de los Premios Impulso a la Innovación a la Movilidad, ha subrayado que el «futuro es eléctrico sí o sí». Recansens, que también es CEO de Ampere y del consorcio del rombo en España ha señalado la superioridad tecnológica del vehículo eléctrico contra el de combustión es «incontestable». En este sentido, ha incidido en que «quien niegue esto niega el futuro y el progreso».
Cierre de fábricas en Europa
Durante su primera intervención pública como presidente de la patronal de fabricantes de vehículos ha recordado que en las últimas semanas algunas marcas han avisado del cierre de fábricas en Europa, a la vez que se han anunciado despidos en gigafactorías —por ejemplo, Northvolt ha alertado de que prescindirá de 1.600 empleos—.
En este sentido, quiso «poner en valor el esfuerzo que está haciendo el Gobierno de España, el Ejecutivo regional y las empresas privadas en la apuesta» por nuestro país. También recordó que «esto va de competitividad» e innovación y que «el centro de gravedad ya no está en Europa, sino en China».
Más del 60% de los vehículos se fabrican en China
Así, recordó que más del 30% de los coches nuevos se comercializa en este país y que más del 60% de los vehículos eléctricos se fabrican en el gigante asiático.
Además, es más competitivo en mano de obra y precio de la energía por lo que instó a Europa a trabajar en la innovación «de forma conjunta» entre las empresas y el regulador para no quedarse atrás. A pesar de la desventaja recordó que Europa tiene recursos y know-how.
Por su parte, la presidenta de Faconauto, Marta Blázquez, apuntó que el sector tiene 12 meses para que los eléctricos alcancen un 25% de cuota de mercado en Europa. Esto, en el caso de España, supone un incremento de 20 puntos porcentuales.
12 meses para que un 25% de las ventas sea eléctrica o para el abismo
Así, se refirió la directiva a la necesidad de que la media de automóviles vendidos de cada marca se sitúe en el entorno de 95 gramos de CO2 en 2025 para cumplir con la normativa comunitaria. Una meta que supone en la mayoría de los casos que uno de cada cuatro matriculaciones sea cero emisiones.
A juicio de Blázquez —y de los fabricantes que lo han ido advirtiendo con anterioridad—, esto se consigue vendiendo más VE o entregando menos automóviles de combustión, lo que repercutirá en la economía europea y en el empleo.
Por ello, desde Faconauto se ha pedido eliminar las multas por no cumplir el objetivo de emisiones, así como incentivos fiscales para que se vendan más vehículos eléctricos.
Un sector, con muchas amenazas
Asimismo, en línea con el líder de Anfac, el presidente de Sernauto, Francisco Riberas, alertó de que estamos en un periodo con muchos cambios. El primero es una bajada de volumen de producción mundial y sobre todo en Europa, lejos de los números de hace siete años.
Asimismo, se ha producido una subida de costes fuertes, a lo que se suma que está en riesgo por el reto de la descarbonización. No obstante, señaló que el anuncio de la nueva resolución del Perte VEC III, que implica 133,7 millones de euros para una gigafactoría de Stellantis en Zaragoza, va en línea con los que se debe hacer.