El nuevo Dacia Spring, el reciente restyling del primer eléctrico de la marca, se fabrica en la planta de eGT New Energy Automotive en Hubei, China, en conjunto con Dongfeng, que también ha lanzado su gemelo Nano Box. Esta circunstancia hace que pueda verse afectado por los derechos compensatorios impuestos por la Comisión Europea a los VE importados desde la República Popular.
En concreto, Dongfeng es una de las marcas que colaboraron con la investigación pero que no se tuvieron en cuenta para la muestra, razón por la que el nivel adicional arancelario establecido para ellos será de un 19,9%. No obstante, Francisco Hidalgo, director general de Dacia España, ha afirmado, durante una prueba dinámica del vehículo, que por el momento esta medida no influirá en los precios establecidos para el Spring, que mantiene el mismo coste de adquisición desde que nació, en 2021.
Los aranceles, a la espera de su aprobación definitiva en noviembre
«Cada tres meses se cambian las normativas e intentamos absorber todo ese ruido y servir de filtro para que los clientes no se pierdan con estas modificaciones y no se asusten y renuncien a comprar un eléctrico», explicó el directivo «no le podemos transmitir al usuario toda la incertidumbre que hay en el mercado». Y es que los aranceles aún se encuentran en una fase provisional, a la espera de alegatos y negociaciones entre China y la UE, así como de su posible aprobación definitiva, que tendría lugar en el mes de noviembre.
Sobre la posibilidad de subirlos una vez sean definitivos, aseveró que no se podía saber por ahora y que tendrán que ver como actuar en dicho momento y cuando tengan toda la información ya que son «decisiones complejas». A pesar de reconocer de que su confirmación podría suponer la pérdida del 20% del precio de cada coche que se venda durante los próximos seis meses, Hidalgo declaró: «asumimos el riesgo, que es difícil de cuantificar pero está ahí».
Además, manifestó su desconfianza sobre que los derechos arancelarios salgan finalmente como están establecidos en la actualidad. «Es difícil prever como van a evolucionar», dijo. También, manifestó la importancia de seguir centrados trabajando en otros aspectos de reducción de costes, como el peso, así como en nuevos servicios y funcionalidades que animen a la transición a la movilidad ecológica.
Por el contrario, Tesla ha decidido subir los precios del Model 3, debido a que este se fabrica en Shanghái (China), en algunos países europeos como Alemania, Países Bajos y España en unos 1.500 euros dependiendo de la variante del modelo. El fabricante de automóviles había advertido en junio de que podría subir el valor de sus vehículos a partir de este mes como consecuencia de los aranceles, que en el caso de la compañía norteamericana este suponía un impuesto adicional del 20,8% sobre sus coches. A pesar de esto, la marca ha solicitado un nuevo cálculo de su tarifa, según informó la Comisión Europea.
Dacia Spring, desde 10.890 euros, con las ayudas del Moves III
En concreto, este crossover urbano partirá de 17.890 euros para su acabado Expressión con motor de 45 CV (que pueden quedarse en 10.890 euros con las ayudas del Moves III, que se adelantan por la propia empresa, a lo que hay que sumar el descuento del IRPF del 15%, hasta un máximo de 3.000 euros); con un propulsor de 65 CV serían 18.890 (11.890 con ayudas); y, finalmente, la gama más alta, Extreme, con los mismos caballos, alcanzaría los 19.890 (12.890). Además, proponen un plan de renting cuya entrada sería la equivalente a la subvención del Moves y con una cuota mensual de 55 euros.
Desde 2021, Dacia ha comercializado más de 150.000 unidades del Spring, 62.000 de las mismas durante el 2023. Se trata del cuarto cero emisiones más vendido en España y absorbe un 10% del segmento A, incluyendo también los modelos térmicos. Además, de este modelo proyectan unas ventas mayores que del anterior, que podrían verse impulsadas por un nuevo plan del gobierno que sustituya al Moves (que por el momento está asegurado hasta el 31 de diciembre) y que, en caso en el que se plantease de forma distinta y con ayudas más inmediatas, «quitaría una traba importante para la expansión del eléctrico», de acuerdo con Hidalgo.
