El presidente y consejero delegado de Ford Iberia, Jesús Alonso, ha comunicado hoy a su red en España que la marca «apuesta por el concesionario», por lo que descarta la implantación del contrato de agencia genuina, según han señalado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector. De esta manera, el formato de venta, y la vinculación entre las partes, continuará como hasta ahora, mediante el de distribución selectiva. Así, se prescinde de una futura renovación contractual.
Esta notificación, mediante una videoconferencia celebrada a las 10 de la mañana, y con la mayoría de los inversores conectados, llega después de que en marzo de 2022 se comunicara a los vendedores desde la central europea la voluntad del cambio a agentes. Para ello, iniciaron en 2023 un proyecto piloto en los Países Bajos para una posterior implantación en el resto de mercado europeos, aunque no se especificaban fechas.
Sin embargo, desde entonces, el fabricante ha ido ampliando los plazos para la toma de una decisión sobre el momento en el que se impulsaría en cada país, algo que requiere, además, la renovación de los actuales contratos y su cancelación, punto que se debe notificar con dos años de antelación.
Pero, pese a la voluntad inicial, en España primero se dijo que se determinaría la fecha de la puesta en marcha durante 2023, después a finales del mismo y, posteriormente, durante el primer semestre de 2024. De hecho, el pasado febrero, durante la Asamblea de Concesionarios de la Asociación de la red nacional, se les notificó que se aplazaba sine die la decisión sobre la llegada del modelo de agencia para, finalmente, tal y como se ha comunicado hoy, queda descartada.
La marca mantendrá el stock de varios modelos
También se mantendrá la excepción en el soporte del stock de diversos modelos en el concesionario. Los Ford Mustang gasolina, Mustang Mach-e, Tourneo Connect, Bronco y Explorer —tanto en la generación anterior como en la nueva que está por aterrizar—, se comercializan de forma tradicional al cliente final, aunque las dos unidades con las que cuenta el establecimiento, una para la exposición y otra de demo de prueba, forman parte de una campa común cuyo coste financiero no asume el distribuidor sino el fabricante. Una decisión que ha sido bien acogida por la red porque reduce su coste de explotación.
Todo ello se mantendrá como hasta ahora gracias a la existencia de una adenda en los actuales contratos. No obstante, la marca también estudia que los eléctricos se vayan uniendo a esta gestión del stock de manera centralizada.