El futuro comercial de la marca Seat acaba de recibir un fuerte espaldarazo, después de que el Grupo Volkswagen, ante una previsible flexibilización de la aplicación de la normativa Euro 7, haya aprobado alargar el ciclo de vida de la actual gama de vehículos de la enseña española.
Fruto de esta decisión, la firma continuará produciendo modelos de combustión eficientes e híbridos enchufables como poco hasta finales de la década, lo que significará haber ganado, por el momento, alrededor de tres años de actividad comercial con su porfolio de producto respecto a la planificación inicial, que situaba al término de 2027 o principios de 2028 el punto y final del último modelo, que era la actual generación del León.
Considerando un más que posible aplazamiento del estándar medioambiental Euro 7 hasta finales de 2026 —de partida se esperaba que se aplicase en julio de 2025—, Seat tiene previsto lanzar antes de esa fecha unos facelifts del Ibiza, del Arona y del León. Unos rediseños en los que ya está trabajando la compañía, como desveló el presidente, Wayne Griffiths, en el Salón del Automóvil de Barcelona.
En los dos primeros casos, estos coches tenían como fecha de finalización comienzos de 2026 –simultaneando su producción en Martorell con los small BEV, el VW ID 2 y el Cupra Raval, durante unos meses—, sin embargo, con el rediseño que recibirán seguirán ensamblándose en la factoría catalana hasta cerca de 2030, lo mismo que sucederá con el tercer vehículo, que se monta también en el mismo centro en la línea 2 junto al Formentor.
Refuerzo para Martorell
Esta ampliación de los ciclos de vida de los productos —afectará igualmente a las gamas del resto de marcas del Grupo VW y en general al conjunto del sector— es una gran noticia para la factoría española, que tendría garantizada una alta actividad hasta el cierre de la década. De este modo, quedaría descartada la falta de carga de trabajo suficiente para la plantilla, que se avecinaba si solo se hubiese contado con los urbanos eléctricos desde la segunda mitad de 2025 y se hubieran dejado de hacer el resto de productos térmicos e híbridos, como habían advertido los sindicatos.
En este sentido, la llegada de la segunda plataforma cero emisiones a la que opta Seat Martorell para automóviles del tamaño del León y Formentor tendría cabida, como pronosticó recientemente Griffiths, a partir de 2030 —para antes, no tendría capacidad la planta—, una inversión que se espera que se pueda validar en la ronda de planificación de producto del consorcio germano PR73 de finales de 2024. No obstante, las centrales sindicales defienden que la nueva arquitectura se incorpore en 2028 o 2029 como tarde.
Aparte del alargamiento del periodo de venta de los tres coches mencionado, es posible que se aplique una cierta extensión para el Ateca y Tarraco, según indican a La Tribuna de Automoción fuentes del sector, dos todocaminos que tendrían su despedida al poco tiempo del lanzamiento de los Cupra Tavascan y Terramar, que llegarán en el primer y segundo semestre de 2024, respectivamente.
Entrada a la electrificación de Seat
Una vez ampliada la actividad con la actual gama de producto de la marca española, el siguiente capítulo que se tendrá que abordar sobre el futuro de la compañía sería el enfoque que tendrá para la siguiente década y de qué manera se adentrará en la electrificación, un campo que ahora solo se está desarrollando con el porfolio de Cupra.
Hasta la fecha, el fabricante ha asegurado públicamente la continuidad de la enseña y se encuentra analizando qué estrategia implementará de cara a la movilidad 100% cero emisiones. “Llegará el momento de la electrificación de Seat”, ha subrayado hoy el presidente de la firma en el Automobile de Barcelona.
Su acceso a esta tecnología, como detalló el ejecutivo recientemente, podría centrarse en ofrecer servicios y productos de movilidad para jóvenes en entornos urbanos, como sharing, suscripciones o micromovilidad. Para tal fin, cuenta actualmente con el sello Seat Mó, que comercializa patinetes y dos scooter (basados en modelos de Silence), y tiene en proyecto en lanzamiento de un cuadriciclo.
Este vehículo se desarrollará a partir del S04 comercializado por la empresa precedente propiedad de Acciona. Según fuentes del sector, su venta se podría iniciar en 2025.
