A medida que se van sumando países, estados y ciudades a los objetivos de descarbonización globales recogidos en el acuerdo de la COP26 —uno de los puntos principales es que los turismos y furgonetas matriculados sean cero emisiones en 2040 como tarde, y en 2035 en los países líderes, los fabricantes del automóvil están llevando a cabo cuantiosas inversiones para transformar sus cadenas de valor ante una oleada de producto cero emisiones para el cual, según el analista de Sistemas de Propulsión de Autoforecast Solutions, Brian Maxim, «la demanda del consumidor sigue siendo una incógnita y lo márgenes de beneficios, considerablemente menores que los térmicos durante años».
El consultor es una de la fuentes citadas por el último informe de Reuters, que cifra el desembolso de los constructores en 450.350 millones de euros entre…
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