La fábrica de Mercedes en Vitoria, otra vez más, vuelve a ser un verso suelto entre los centros de montaje de vehículos y no logra encarrilar un acuerdo con su Comité de Empresa para algo tan trascendental como la organización del trabajo. Ante la comunicación de la dirección el 26 de octubre de que para 2021, un ejercicio en el que se prevén fabricar 131.500 furgonetas, será necesario arrancar el 4 de enero con un esquema de funcionamiento de dos turnos normales y un tercero a la mitad —con una duración de al menos un trimestre—, lo que supondrá la no renovación de alrededor de 500 temporales, los sindicatos han mostrado su oposición frontal.
Así, van a llevar esta decisión a la Justicia al tratarse, en su opinión, de una modificación sustancial de las condiciones laborales, de modo que para implantarse debería hacerse con el consenso de la parte social. Según han informado fuentes sindicales a La Tribuna de Automoción, se va a presentar próximamente en el Juzgado de lo Social una denuncia, que…
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