El Gobierno ha vuelto a confirmar “su compromiso con el futuro de la automoción” en España y ha asegurado que trabajará, “junto a sus representantes”, en la puesta en marcha, una vez concluya la crisis sanitaria, de “medidas de estímulo de la demanda a corto y medio plazo para favorecer la reactivación y adaptación del sector hacia opciones de movilidad eficiente y sostenible”.
Este mensaje, que ha sido trasladado a los máximos responsables de Anfac, Sernauto, Faconauto y Ganvam en la reunión que han mantenido esta tarde con la vicepresidenta cuarta y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera; la ministra de Industria, Reyes Maroto; y el director del Departamento de Asuntos Económicos de Presidencia, Manuel de la Rocha, supone dar un espaldarazo a los planteamientos sectoriales sobre la necesidad de que se lancen incentivos a la compra, entre otras medidas, que en el caso del plan de choque que han presentado en el encuentro las patronales ascienden a un mínimo de 400 millones de euros.
En el comunicado publicado por ambos departamentos ministeriales, no se detalla el tipo de estímulos que se desplegarán y si considerarán las reivindicaciones del motor de que beneficien a todo tipo de propulsiones y que la gestión sea centralizada, dos cuestiones que sí defiende el Ministerio de Industria, tal y como ha adelantado este medio.
Más allá de las iniciativas del lado de la demanda, el Ejecutivo también ha mostrado su intención de abordar medidas para la oferta, de cara a fortalecer la inversión y la innovación industrial y la competitividad futura de la automoción, “en línea con el plan de recuperación económica que prepara la Comisión Europea y con el Pacto Verde europeo“.