Ignacio Anasagasti / Madrid
La dirección de la fábrica de Renault en Sevilla ha comunicado, recientemente, una revisión del programa de producción de 2016, que supone un alza de 100.000 cajas de velocidad, con lo que se prevé un volumen de alrededor de 1.100.000 unidades para este ejercicio, lo que representaría un incremento del 9% respecto a 2015, según informan a La Tribuna de Automoción fuentes del sector.
Este aumento de los encargos, que afecta a los dos productos que se hacen en la fábrica andaluza (J y TL4), implicará la contratación de entre 50 y 70 empleados temporales, un proceso que ya se ha iniciado y que podría concluir antes del comienzo de las vacaciones estivales de la planta, el próximo 1 de agosto.
El volumen adicional estimado obligará al centro a completar con más personal diversos cuartos turnos —se trabajan 12 horas en sábado y domingo, y ocho horas un día entre semana—, sobre todo en mecanizado, e incluso a que se pongan en marcha algunos de los denominados quintos turnos, que no es otra cosa que un calco de los cuartos, aunque empezando la faena a continuación, en cada uno de los tres días.
Los eventuales contratados, en su mayoría, trabajarán en los turnos normales, según explican fuentes del sector, que añaden que habrá rotación, entre los cuartos y quintos turnos, cada dos semanas, para que no haya diferencias salariales —en el quinto, al trabajarse de noche se cobra más—.