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Renault abre su primera planta en China, para potenciar sus ventas en el gigante asiático

J.M./Wuhan (China)

2016 llega con nuevas aperturas industriales para Renault, en este caso en China, donde inauguró ayer su primera fábrica. El fabricante francés, con su socio chino Dongfeng —operan desde diciembre de 2013 con una joint venture denominada Dongfeng Renault Automotive Company (DRAC)— ha invertido 870 millones de euros en poner en marcha unas instalaciones, situadas en Wuhan, con una superficie de 950.000 m2 y una capacidad productiva inicial de unos 150.000 vehículos anuales.

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J.M./Wuhan (China)

2016 llega con nuevas aperturas industriales para Renault, en este caso en China, donde inauguró ayer su primera fábrica. El fabricante francés, con su socio chino Dongfeng —operan desde diciembre de 2013 con una joint venture denominada Dongfeng Renault Automotive Company (DRAC)— ha invertido 870 millones de euros en poner en marcha unas instalaciones, situadas en Wuhan, con una superficie de 950.000 m2 y una capacidad productiva inicial de unos 150.000 vehículos anuales.

 

La fábrica contará con tres departamentos distintos: montaje de vehículos, planta mecánica de fabricación de motores y un centro de I+D. El primer modelo que ha salido de la única línea de montaje es el Renault Kadjar, un SUV deportivo del segmento C, que se produce también en Palencia. Aparte de este coche, la empresa comunicó que el siguiente automóvil en fabricarse será otro SUV, en este caso del segmento D, tras el que llegará una versión del Fluence eléctrico, en 2017.

La plantilla inicial está compuesta por 2.000 trabajadores, de ambas firmas. Aunque inicialmente sólo se ha implantado una línea de producción, en el futuro, si la demanda lo requiere, se podrían abrir hasta dos nuevas líneas de montaje sin problemas, llegando a duplicar la capacidad anual del centro.

Por otra parte, la planta de elementos mecánicos está formada por tres departamentos: fundiciónmecanizado y ensamblado, donde trabajarán 250 personas especializadas. La parte de fundición producirá dos piezas para el motor de 2 litros que se fabrica en Wuhan y que equipa el Kadjar: el bloque de motor y la culata de cilindros.  En cuanto al centro de investigación y desarrollo, que contará con 300 empleados, se encargará, entre otras cuestiones, de adaptar los vehículos ensamblados a los gustos del consumidor chino.

Más allá de los planes industriales de Renault, en el plano comercial, la marca dispone de una red de concesionarios en China, con 125 puntos de venta, presente en todas las provincias. En los distribuidores se venderán modelos fabricados localmente e importados. Para conseguir un mayor impacto, el fabricante está llevando a cabo iniciativas que se salen de los modelos convencionales de distribución, por ejemplo abriendo tiendas especiales vía satélite o realizando exposiciones de gama urbanas.

 

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