La red de concesionarios de Ligier Group, el fabricante líder de micromovilidad con las marcas Ligier, Microcar y Ligier Professional, está actualizando la imagen de sus instalaciones en toda Europa para modernizarla y adaptarse a las nuevas necesidades de los clientes. Un proceso en el que España es uno de los mercados europeos más avanzado, puesto que ya cuenta con un 70% de la estructura comercial remodelada, gracias a la intervención en 40 puntos de venta.
El primer establecimiento en convertirse en Ligier Store ha sido el de Motor Ely en Madrid, con una inversión de 60.000 euros para una tienda de 120 metros cuadrados. En la reconversión, el fabricante está apoyando a sus distribuidores con mobiliario y el rótulo exterior con los colores blanco, azul y amarillo que identifican a la compañía.
Según el director comercial global de Ligier Group y responsable de las filiales de España e Italia, Antonello Curcuruto, el objetivo del cambio estético es dotar a los concesionarios de «una imagen más premium», así como «mantener un estilo identificativo, que se pueda reconocer bien, al entrar en cualquiera de nuestras tiendas, que es un espacio Ligier».
No obstante, a pesar de que se ha pretendido refinar al máximo todos los aspectos, desde la acogida, al ambiente, dando protagonismo a los colores corporativos, el directivo aclara que se ha buscado que los «costes no sean tan elevados como en una marca de coches». Al respecto, argumenta que el nivel de facturación de sus socios «no justifica el desembolso» que acometen este tipo de distribuidores.
Una inversión de 60.000 euros para una concesión de 120 metros cuadrados
Por ejemplo, el concesionario de Madrid Motor Ely, que se sitúa en la calle Alcalá 578 y que regentan los hermanos Martínez, ha realizado una inversión de 60.000 euros para una instalación de 120 metros cuadrados. Es cierto que en su caso han hecho un cambio radical de la tienda, dotándola de más luminosidad y renovando completamente el local.
Ligier ayuda a sus distribuidores aportando mobiliario, que proporciona confort y calidez a los clientes, la pared amarilla y el rótulo exterior, a la vez que implica una uniformidad de las Stores del grupo francés al fijar los estándares. Asimismo, les provee la información de la que deben disponer para la remodelación de las tiendas.
Uno de los aspectos que recalca Curcuruto es que ahora los concesionarios tienen una identificación clara al lucir en la rotulación la marca Ligier, con los colores blanco, azul y amarillo que identifican a la compañía. Antes, en muchas ocasiones, en la cartelería se daba prioridad al nombre comercial propio de la concesión o incluso a veces con el nombre de una marca de coches.
El director comercial del consorcio aclara que es una decisión para toda Europa, «de Noruega a Sicilia», y que ha empezado progresivamente, pero que la intención es continuar. De hecho, avanza que, «si entra un nuevo concesionario, le exigiremos esta nueva imagen».
Dentro de esta ofensiva, España es uno de los países que está más avanzado en la evolución de los puntos de distribución a las nuevas stores. Según el director comercial en nuestro país, Jaime Gálvez, 40 instalaciones ya se han adaptado, lo que constituye un 70% de la red. El resto lo irá haciendo progresivamente.
Motor Ely, el primer concesionario español con nueva imagen
El primer concesionario en incorporar la nueva imagen corporativa ha sido Motor Ely, una instalación, que como se indicaba anteriormente, se ubica en Madrid. Los hermanos Martínez, que son propietarios de tercera generación, destacan principalmente que el local ha ganado en luminosidad y presenta un aspecto moderno y renovado. Al asomarse a su interior, pocos, dirían que este espacio se inauguró en 1960 vendiendo bicicletas y motos para todo el barrio de Canillejas. No obstante, no sería hasta 2003 cuando comenzaron a comercializar Ligier de forma oficial.
Fue en este momento cuando dieron el salto definitivo, hasta el punto de que su buen hacer les ha permitido vender alrededor de 200 cuadriciclos nuevos al año de Ligier y Microcar —junto con su tienda de Las Rozas—, lo que hace que alcancen el 80% de cuota de mercado en Madrid de este tipo de vehículo. Sin embargo, no solo viene gente de esta comunidad, sino que lo hacen de todos los rincones del país.
Entre los pilares estéticos de esta store, que es uno de los emblemas de Ligier en España, destacan, además de la distribución funcional que confiere una imagen de más espacio al local, una pared amarilla, que resalta el ADN juvenil de la marca, un suelo gris, y unos sofás que confieren comodidad a los clientes y un tono moderno. Este enfoque encaja muy bien con una clientela en la que el 80% tiene entre 15 y 18 años y que está interesada principalmente por cuadriciclos ligeros (L6) y motores de combustión.
Un público que lo que viene buscando a las tiendas de Ligier es seguridad, por los chasis, los refuerzos de las puertas de los microcoches y los frenos de disco; motorizaciones y diseño. Habitualmente, son jóvenes que llevan a la concesión a los padres, pero a los dos les cuadra porque supone tener autonomía para moverse, lo que beneficia a ambas partes, según afirma uno de los propietarios y gerente de la concesión, Iker Martínez.
Este directivo se muestra satisfecho con los cambios que ha experimentado la instalación y, además, señala que la reforma se ha ejecutado en menos de dos meses, a pesar de que se ha remozado de arriba abajo, lo que hace que los clientes que la conocían antes digan «menudo cambio».
No en vano, afirma Iker Martínez, «hemos cambiado hasta las ventanas que eran de los años 60. Ahora da una imagen de limpieza y está preciosa. Me encanta cómo ha quedado. Da sensación de calidad», resalta. «Es más moderna y es mucho más luminosa», asegura su hermano.
Por otro lado, este cambio de diseño no es el único aspecto en el que está creciendo Motor Ely; el directivo adelanta que van a abrir en enero un nuevo taller en San Sebastián de los Reyes para cubrir los municipios que giran en torno a la A7. Esta decisión se enmarca en que han detectado que muchos dueños de cuadriciclos dejan de ir al reparador oficial, no por el precio, sino por la proximidad.