La antigua fábrica de Nissan Barcelona va a volver a la actividad 33 meses después de haber ensamblado el último NP300 Navara. Si no hay ningún imprevisto, a partir de principios de octubre, la planta reindustrializada por Ebro, que cuenta con un acuerdo de colaboración con Chery, comenzará a ensamblar el Omoda 5 del consorcio chino.
Esto supondrá un adelanto de unos días, puesto que inicialmente se manejaba mediados de octubre para el arranque de la cadena, según ha podido saber La Tribuna de Automoción de fuentes del sector. No obstante, no es descartable que también se avance el ensamblaje del Ebro S700 y el S800 —que se harán sobre la base del Tiggo 7 y 8, de Chery—, agendado hacia el 15 de noviembre. De hecho, incluso señalan que podría empezar antes que el Omoda 5.
Para hacer posible el arranque en fecha, desde el 16 de septiembre 170 empleados cambiarán su contrato de formación por uno de producción, con lo que el personal manufacturero pasará a ser de alrededor de 300 operarios, puesto que en la actualidad ya hay entre 120 y 130 personas que ya ostentan esta condición.
430 por reubicar, 300 ex Nissan por contratar en Ebro Barcelona
Después de este, hito la compañía aún dispondrá de 430 ex trabajadores de Nissan ya enrolados a los que tendrá que buscar una colocación (su contrato también cambiará en octubre), si bien se espera que en el plazo de un año se empiece a fabricar con CKD —frente al DKD inicial, en este momento sí hará falta soldar y pintar lo que demanda de más mano de obra—.
A mayores, aún hay 300 antiguos empleados de la marca japonesa que están esperando para entrar en Ebro Barcelona. Entre la marca española y la china se espera que en 2024 monten alrededor de 1.400 unidades de las que 400 serán de la primera y 1.000 de la segunda, como adelantó este periódico en junio.
Ampliación de capital de Ebro
Por otro lado, Ebro, a través de su matriz EV Motors llevó a cabo su segunda ronda de financiación —la primera fue de 18 millones—, por valor de 40 millones de euros, para ejecutar una ampliación de capital.
La entidad encargada de coordinar la operación ha sido Andbank España, que fue una de las empresas que avaló el proyecto cuando se presentó al Perte VEC. Según informa la entidad, la iniciativa ha tenido un ratio de sobresuscripción de 1,3 veces, lo que demuestra interés en el proyecto.