Los proveedores de la UE lograron un superávit de 26.600 millones de euros en 2023, según informó la Asociación Europea de Proveedores de la Industria del Automóvil (Clepa). Esto se debió al incremento de las ventas a Reino Unido y EE. UU. mientras que el balance con China ha pasado de más de 7.000 millones a solo 3.000 en los últimos tres años, un dato que la misma agrupación entiende podría caer en déficit si en esta ecuación se incluyen las baterías de EV.
Además, con este país se ha producido una reducción del 0,57% en las importaciones, la primera bajada desde 2020. El secretario general de Clepa, Benjamin Krieger, señaló en un comunicado que «no está claro durante cuánto tiempo el sector podrá compensar la diferencia de competitividad de la UE», y añadió que el club comunitario «debe abordar el déficit de financiación y reducir la carga administrativa, fortalecer el mercado único y garantizar energía asequible y fiable para ayudar a los proveedores a prosperar».
