Contra todo pronóstico, Ford Almussafes (Valencia) no ha desvelado en la reunión mantenida este martes, el número de excedente de personal para el ERE. Desde el sindicato UGT, que cuenta con el mayor número de representantes en la mesa, informan que la compañía les han trasladado que «no están en disposición de dar un número de excedente, debido a la complejidad de la situación» y que lo hará «en fechas próximas», aunque no han puesto un día concreto para este encuentro. Por su parte, STM ha comunicado que la empresa sigue «trabajando en ello, sin entrar en ningún tipo de oferta» y han añadido que «lamentan la situación tan negativa a la que han llegado después de una negociación tan larga».
Por otro lado, sí han confirmado que el actual expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) acaba el 20 de junio y necesitan hacer una extensión. Desde los sindicatos esperan que les convoquen el jueves para iniciar una nueva negociación paralela a la que ya estaba en marcha.
El futuro incierto de Almussafes
A esta situación se llega por la espera de la llegada del nuevo vehículo multienergía que ha sido encomendado para la factoría valenciana a mediados de 2027, encargo que se realizó de forma oficial a finales de marzo, por lo que, hasta entonces, solo se producirá el Kuga y no se generará carga de trabajo suficiente para la actual plantilla.
De esta manera, los sindicatos muestra su satisfacción por «alcanzar la cifra de 300.000 unidades al año», tal y como reveló el vicepresidente europeo de la compañía, Kieran Cahill, una cifra que los mismos estiman que es superior a la que habría supuesto la llegada del modelo eléctrico, varias veces aplazado para la fábrica de Almussafes. Sin embargo, lamentan los expedientes de regulación que limitarán el trabajo de unos y pondrán fin a la relación contractual de otros.
Un Mecanismo Red que no pudo ser
Por este motivo, al inicio de las negociaciones, la propia organización sindical solicitó que se activase el Mecanismo Red de Flexibilidad y Estabilización del Empleo. Aprobada con la reforma laboral de 2021, se trata de una alternativa que hubiese salvaguardado el empleo hasta que se iniciase la producción del nuevo automóvil. No obstante, esta medida tiene que ser aprobada en Consejo de Ministros y nunca se ha aplicado directamente a empresas, sino que se trata de una ayuda para los sectores.
Además, existen dos condiciones. Por un lado, «cuando se aprecien cambios permanentes que generen necesidades de recualificación y de procesos de transición profesional con una duración máxima inicial de un año y la posibilidad de dos prórrogas de seis meses cada una». Por otro, cuando «se aprecie una coyuntura macroeconómica general que aconseje la adopción de instrumentos adicionales de estabilización, con una duración máxima de un año», según se recoge en el Real Decreto-ley 32/2021 de 28 de diciembre. En el caso de Ford Almussafes tendría que haber sido del primer tipo, aunque no se pudo aplicar por no darse las condiciones necesarias.
De haberse activado el Mecanismo Red, los trabajadores no habrían consumido la prestación por desempleo y habrían percibido un 70% de la base reguladora con un tope máximo mensual del 225% del Índice Público de Rentas de Efectos Múltiples (Iprem) incrementado en una sexta parte.
