El director general de la asociación de fabricantes Anfac, José López-Tafall, ha aclarado que no cree que las eléctricas repercutan la subida de costes a los clientes, después de que el presidente del Gobierno anunciara ayer durante el debate del Estado de la Nación, la creación de un impuesto que pretende gravar, con alrededor de 2.000 millones de euros al año durante 2023 y 2024, los beneficios extraordinarios que están teniendo «los grupos dominantes en el sector eléctrico, petrolero y gasista», desde la invasión de Ucrania por parte de Putin.
López-Tafall ha matizado que, aunque no sabe cómo se va a configurar ese gravamen, “el mercado de generación es cada vez más abierto y hay más operadores“, a la vez que ha reivindicado los contratos a largo plazo firmados entre los fabricantes y las energéticas, que dan estabilidad a los costes de las plantas.
También se ha mostrado “optimista” en cuanto a la evolución del mercado de vehículos en España si se resuelve el problema de suministro de los chips, a pesar de que el escenario general no ayuda, sobre todo, después de que esta mañana el INE haya confirmado el dato adelantado de inflación del 10,2% en junio.
Una caída del mercado de entre un 7,4% y un 3,4% en 2022
No obstante, de cara a las matriculaciones de automóviles para 2022, calcula que concluirá en una horquilla de 800.000 a 830.000 unidades, lo que supondría una reducción de entre un 7,4% y un 3,42%, frente a las 859.477, con las que cerró 2021 (+1%).
De los datos más relevantes de 2021 sobresale un incremento de la facturación del 1%, alcanzando los 60.908 millones de euros, que se tradujo en un resultado neto de 1.011 millones de euros, mientras que las inversiones del sector alcanzaron los 1.473 millones de euros.
Por su parte, entre las aportaciones que hace la automoción a la economía española, además del empleo que genera de 61.704 personas, a pesar de que se contrajo un 12% —por encima del 7,5% que cayó la producción el pasado ejercicio—, la balanza comercial se situó en 18.984 millones de euros, mientras que la recaudación fiscal llegó a 34.148 millones de euros (+15,9%).
Uno de cada tres vehículos no tiene etiqueta
Entre las cuestiones que se incluyen en el informe anual de Anfac, destaca que, del total de 29.875.956 vehículos inscritos en España, según los datos de la DGT, 9,92 millones no tienen etiqueta, lo que supone una reducción del 6,1%, respecto a 2020, pero aún aglutina al 33,2% del parque, y siguen siendo el grupo mayoritario. En el otro extremo, hay 162.071 unidades con distintivo cero (eléctricos o híbridos enchufables con un mínimo de 40 km en modo eléctrico), lo que supone un incremento del 71,6% y un 0,54% del conjunto nacional.
No obstante, los de pegatina C, representan el segundo escalón más amplio con 9,57 millones de unidades (+7,4% y un 32,03% del total), adelantando a los B, que se reducen hasta 9,41 millones (-1,6%, 31,49%, respectivamente). Por su parte, los Eco (híbridos y de gas), alcanzan las 804.310 unidades (+40,1%) y un 2,69% de todos los vehículos.
Respecto a la implantación de los puntos de carga, a 31 de diciembre de 2021 había 13.441 en España. En este ámbito, Cataluña, con 3.549, lidera la clasificación, seguida por la Comunidad de Valenciana, que tiene 1.661, y Madrid, 1.601. Una cifra que se ha incrementado hasta los 14.300 en lo que va de año, pero que están lejos de los 42.000 que debería haber a final de 2022, según critica el director general de Anfac.