La gigafactoría de baterías que el Grupo Volkswagen y Seat van a poner en marcha en Sagunto (Valencia), la que será la primera instalación de este tipo en España, experimentará un pico de contrataciones entre 2025 y 2026, coincidiendo con la preparación del inicio de la actividad, que supondrá alcanzar una plantilla de alrededor de 5.000 empleados, según han confirmado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector conocedoras del proyecto de las compañías.
La mayor parte de estos operarios corresponderá, en esas fechas, con eventuales, que tendrían una relación laboral de varios meses, nunca superior al año, de acuerdo con las mismas fuentes. Este máximo de fuerza laboral será puntual, puesto que la planificación de los fabricantes para el centro valenciano contempla que la nómina de trabajadores directos llegue progresivamente a los 3.000 efectivos a finales de la presente década, una vez se consolide una capacidad productiva de 40 GWh, tal y como especificó el presidente del Consejo de Administración de Seat y responsable de Tecnología del consorcio alemán, Thomas Schmall, en un acto que se celebró el pasado 5 de mayo en los terrenos donde se construirá la planta —en el polígono Parc Sagunt II—.
Esta publicación ha contactado con la marca española para que valore esta información y fuentes de la misma ni la han confirmado ni desmentido, remitiéndose únicamente a los datos desvelados a comienzos de mes en el evento que contó con la participación del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
La necesidad de los 5.000 empleos, a la que precederá la instalación de toda la maquinaría a lo largo de 2024 —la construcción de las instalaciones arrancará en el primer trimestre de 2023—, responde al fuerte requerimiento de plantilla en los lanzamientos de una nueva actividad industrial, siendo imprescindible incluso doblar puestos en determinadas áreas, según comentan a este medio fuentes del sector.
Los primeros coches españoles, sin las baterías de la gigafactoría de Sagunto
La producción de las preseries de las celdas para las baterías comenzará a finales de 2025, mientras que las unidades ya definitivas saldrán de las cadenas de montaje al poco de entrar en 2026. Este marco temporal obligará a que, durante varios meses, los coches urbanos eléctricos que se ensamblarán en Seat Martorell a partir del segundo semestre del ejercicio de mitad de década equipen las pilas de otro centro, en este caso el alemán de Salzgitter.
El primer vehículo cero emisiones en llegar a las calles será el Cupra, basado en el concepto UrbanRebel, tras el verano de ese curso. Al cabo de unos tres meses entraría en fabricación el modelo de VW y el tercero, un Skoda, tendría que esperar hasta 2027. En el caso de los automóviles que hará la planta navarra de Landaben, dos de tipo SUV para las dos últimas enseñas, contarán con los acumuladores de energía de Sagunto, ya que su salida al mercado está prevista para 2026 con una diferencia de varias mensualidades entre ambos.
