Cámara de Combustión
Hay días que se tuercen y no dejan sitio nada más que para la tristeza. Esto me ocurrió el pasado viernes, cuando mi buen compañero y amigo Pablo M. Ballesteros me llamó desde la redacción para comunicarme que había fallecido una de las personas más queridas y respetadas dentro del sector de automoción de este país, Manuel Fernández ‘Lito’. El viernes por la tarde, no me quedó más remedio que ponerme rumbo a Asturias donde su familia y muchísimos amigos hacían guardia para dar el último adiós a este compañero de tantas batallas y, sobre todo, de tantas negociaciones.
Porque, queridos lectores, la mejor arma de Lito para la negociación era el diálogo y uno de sus grandes valores era la ideología, esa materia que tanto escasea en la clase política de nuestro país. Los directivos coherentes de las empresas que fabrican en España saben muy bien que lo que estoy diciendo no es producto de un paisanaje o de un adiós. Todo lo contrario, es fruto de una trayectoria que ha llevado a que las factorías de coches de nuestro país estén trabajando…
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