Pablo M. Ballesteros / Ávila
La fábrica abulense de Nissan ya ha comenzado la producción del nuevo camión NT500 que sustituye al Atleon del que se fabricarán cerca de 3.000 unidades en el primer año, de las que 2.000 se venderán con el emblema de Renault y 1.000 con el de Nissan, según declaró el consejero general y vicepresidente de Operaciones Industriales de Nissan en España, Frank Torres a esta publicación.
Gracias a estas 3.000 unidades, frente a las alrededor de 1.500 que se han ensamblado en los dos últimos años del Atleon, se podrían alcanzar las 11.000 unidades –de las que un 90% se venderá en el mercado europeo– una vez que finalice el año, si se tienen en cuenta los cerca de 8.000 Cabstar, el camión de menor tonelaje que también se ensambla en Ávila, la única factoría de industriales de Nissan en el continente.
La planta castellana, que cuenta con 56 años de historia, ha recibido una inversión de cerca de 100 millones de euros para adaptar la cadena de producción al nuevo NT500, del que se pretende fabricar entre 10.000 y 15.000 unidades, aunque dependerá de la evolución del mercado.
Torres señaló que, a pesar de que habrá que emplear medidas de flexibilidad similares a las de los dos años anteriores (durante varios días los trabajadores no van a la fábrica y cobran cinco de las ocho horas de la jornada), habrá trabajo suficiente para los 501 empleados de la planta, a la vez que aclaró que la intención es cumplir con el acuerdo alcanzado en 2010 para que en abril se incorporen los 22 trabajadores que salieron de la fábrica.
En total, contando los 100 millones de euros invertidos en Castilla y León, Nissan ha invertido cerca de 430 millones desde 2012 en España, entre el centro de Barcelona, el de Cantabria y el de Ávila.
En el acto de inicio de producción del nuevo camión que se venderá con unos tonelajes que irán de
Entre las autoridades, el trabajador más mayor, el más joven y una de las mujeres de la fábrica, pintaron el segundo ojo del Daruma, que según la tradición japonesa garantiza el éxito del proyecto. El primer ojo se dibujó cuando se confirmó que el camión se haría en Ávila.