Ignacio Anasagasti / Madrid
La plantilla de la fábrica de cigüeñales de Volvo Trucks en Leganés (Madrid) ha desconvocado la huelga que tenía previsto realizar para los días 4, 5 y 6 de octubre, después de una reunión mantenida ayer con un responsable de la matriz (Jan Ohlsson, vicepresidente sénior de Volvo Group Trucks Operations), en la que la empresa y los representantes de los trabajadores se comprometieron a seguir negociando el futuro de la planta y evitar así su cierre, según han informado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector.
En el encuentro, se acordó que en la semana del 14 de octubre se celebre una reunión entre el Comité de Empresa, la directora de Recursos Humanos de Volvo Trucks, el director de la factoría de Leganés y su directora de Recursos Humanos, para iniciar los contactos para negociar la salida de entre 40 y 50 empleados, afectados por la clausura de una de las líneas de producción del centro madrileño a finales de marzo de 2014.
Los sindicatos tienen previsto presentar a Volvo una propuesta que se basará en el plan social que se aprobó cuando se produjo el cierre de la fábrica de camiones de la marca sueca en Villaverde (Madrid), según señalan fuentes del sector.
Aparte de la reunión de la semana del 14 de octubre se celebrará otra en el Ministerio de Empleo la siguiente semana, en la que estará presente el vicepresidente ejecutivo de Volvo Trucks, Mikael Bratt. En ella, se hablará sobre las posibilidades de que Leganés siga produciendo el cigüeñal MD11, lo que supondría la continuidad de la planta.
“Decisión no tomada”
En la reunión de ayer, el directivo de Volvo subrayó que la decisión sobre el futuro de la factoría madrileña “no está tomada y que los trabajadores no se tienen que precipitar porque puede tener consecuencias”, según informan fuentes presentes en la cita. Sobre la posibilidad de que otro suministrador oficial (Skode) ya tenga los planes de inversión para asumir la actividad y de que un centro de recambios de Volvo en Guadalajara se traslade a Leganés, Ohlsson negó la mayor, aunque puntualizó que “son opciones” que pueden darse, según las mismas fuentes.
A pesar de la visita del responsable del fabricante, los representantes sindicales tienen la sensación de que “la decisión de cierre ya está tomada y que sólo están dando largas dentro de una estrategia”, según comentan a esta publicación. Sea como fuere, de momento, la empresa quiere seguir de cerca la cuestión, celebrando dos reuniones para buscar una salida a la situación del centro de Leganés.
Mientras se producen estos encuentros, la plantilla podría realizar algún tipo de movilización, entre ellas una concentración ante la embajada de Suecia para demandar trabajo para la fábrica.