Ignacio Anasagasti / Madrid
La liquidación de las fábricas de Bérriz y Abadiano sigue adelante. Después de que el Consejo de Administración del grupo MZ la solicitara el martes en el Juzgado de lo Mercantil de Bilbao, ya se ha dictado el auto con el que se da luz verde al proceso, según han informado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector, que indican que el documento se entregó ayer a los representantes de los trabajadores de los Comités de Empresa.
El auto de liquidación, informan las mismas fuentes, ha supuesto el nombramiento de dos liquidadores que serán los encargados de gestionar todas las operaciones. Mientras tanto, en ambos centros de trabajo vizcaínos sigue activa la huelga indefinida, que puede dejar sin suministro próximamente a, entre otras, la factoría de montaje de Mercedes en Vitoria (tiene cajas de asiento hasta el sábado) y a la de PSA en Vigo (cuenta con componentes hasta la semana que viene).
El miércoles se reunieron los representantes de los trabajadores con el mediador del Gobierno vasco, J. Javier Losantos Omar (director de Trabajo y Seguridad Social), sin que saliera del encuentro ningún pacto con el grupo MZ, según han informado a esta publicación fuentes sindicales.
En las negociaciones, en las que la empresa se comunicaba “telefónicamente” con el mediador, se trataron diferentes propuestas salariales sin que, finalmente, ninguna fuese consensuada. Según ELA, que indica que el acuerdo estuvo “muy cerca”, la compañía planteó congelación salarial para 2013 y 2014 e IPC más un 1% en 2015 y 2016, sin embargo los Comités proponían congelación para este año e IPC más un 1% para los otros tres ejercicios.
Las mismas fuentes de ELA explican que cuando ya casi no había diferencias entre las partes en la cuestión salarial se llamó a la empresa para que hiciera acto de presencia y así poder firmar un acuerdo. No obstante, según el mismo sindicato, el grupo MZ precisó que para cerrar cualquier pacto no estaba dispuesto a incluir los puntos acordados en marzo, con los que se desconvocó la anterior huelga indefinida, entre los que se encuentra el compromiso de mantenimiento del empleo. Tras ello, se dieron por concluidas las conversaciones.
Otras fuentes conocedoras de las negociaciones indican que ante la falta de consenso en los salarios y ante la falta de compromiso por parte del grupo de garantizar el empleo, los Comités solicitaron que se acercara la compañía para negociar directamente con ellos, una demanda que fue rechazada. En ese momento, apuntan las mismas fuentes, se puso punto y final a la reunión de mediación.
Esta publicación ha intentado ponerse en contacto con la empresa para conocer su versión del encuentro de anteayer o sobre el proceso de liquidación sin que haya sido posible recibir respuesta.
El pacto de marzo, clave
Para que se desconvoque la huelga, fuentes de ELA declaran que se tiene que acordar un nuevo convenio, en donde estén presentes los puntos pactados en marzo, como la “ultraactividad indefinida, que no se pueda despedir por absentismo y que no haya movilidad geográfica involuntaria, que se incorpore una garantía del empleo y que se elimine la potestad de la empresa para distribuir un 10% de la jornada de la plantilla”.