Pablo M. Ballesteros / Madrid
Los fabricantes de vehículos, representados por Anfac, han avisado de que en caso de que prosperen algunas de las enmiendas a la Ley de Distribución que se están barajando, “podríamos volver a la situación que se planteó inicialmente” el 15 de febrero cuando estalló la guerra entre concesionarios y marcas.
Según la Junta Directiva de Anfac, la nueva norma perjudicaría a los empleados de las concesiones que serían los “grandes afectados” del nuevo texto.
Los segundos grandes dañados, a juicio de los fabricantes, serían los clientes ya que la nueva Ley podría ocasionar “un alza en los precios de los vehículos”, ya que la nueva normativa provocaría que las marcas tendrían que hacer “elevadas provisiones” para afrontar las posibles indemnizaciones.
El texto actual
El proyecto de Ley que ha enviado el Gobierno, firmado por el Ministerio de Industria y el de Justicia, al Congreso también preocupa a los fabricantes ya que incluye la posibilidad de que los concesionarios cedan el contrato de distribución a un tercero siempre que se comprometa por escrito a cumplir las condiciones o si forma parte de la red de distribución.
Otro aspecto incomoda a las marcas es el de las indemnizaciones ya que establece unos baremos que fija unas compensaciones “muy superiores a las de cualquier país europeo”.
Anfac también teme que en el Congreso de los Diputados se fije que la ley sea retroactiva, algo que no sucede con el texto actual.
Faconauto, en representación de los concesionarios, ha contestado al comunicado de Anfac enviando otra misiva 170 minutos más tarde en la que expresaba su confianza en los grupos políticos que componen la Cámara.
A juicio de los distribuidores, el proceso está siendo “transparente” y todas las partes están teniendo igualdad de oportunidades.
Por otro lado, la mesa del Congreso ha decidido ampliar el plazo para incluir enmiendas hasta el 22 de julio. En principio, el plazo concluía hoy.
