Volkswagen España vislumbra un mercado en 2011 que se situará por debajo del actual, una vez concluidas las ayudas del Plan 2000E y la subida del IVA en este mes de julio, de forma que la cifra de cierre estará el próximo ejercicio en torno a las 900.000 unidades.
Esta es la estimación de José María Peñalver, director general de Volkswagen para el mercado español, en la presentación en Múnich de la nueva generación del monovolumen de VW Sharan, quince años después de su salida al mercado, con una cifra de ventas en todos los mercados por encima de las 607.700 unidades.
La marca germana terminará este año en el mercado español con más de 80.000 coches vendidos, una cifra que contrasta con las 107.000 unidades logradas en el año 2007, periodo récord para todo el sector del automóvil.
La cifra de 80.000 unidades es la misma para el próximo ejercicio, según José María Peñalver, que la califica de desastrosa.
Peñalver aseguró tener cartera para aguantar hasta final de año, con una cifra que hará rozar el 9% en cuota de mercado, dos puntos por encima de la lograda en el año 2005, aunque éste es un parámetro con el que no se come, dijo a Efe el director general de VW.
El éxito comercial del Passat, a punto de ser relevado por una nueva generación, el nuevo Polo y la imbatibilidad del Golf, son los pilares de las ventas de Volkswagen en España.
El nuevo Sharan presentado ahora no llegará al mercado hasta el próximo mes de octubre, colocado en la parte premium del mercado, con unos precios que la marca anunciará el próximo mes de septiembre.
El Sharan será vendido en el mercado alemán con precios entre 28.000 y 32.000 euros, aunque ésta es una cifra orientativa, porque los equipamientos para el mercado germano son distintos a los del mercado español.
Las previsiones de ventas anuales para este modelo se sitúan entre las 500 y 1.000 unidades, explicaron fuentes de la marca a Efe. El mayor volumen de ventas del Sharan se logró en el año 2007 con un registro de 1.000 unidades.
El nuevo Sharan comparte plataforma con el Seat Alhambra, cuya llegada al mercado está prevista para el último tramo del año, y se fabrica en la planta portuguesa de Palmela.
Esta instalación cuenta con una plantilla de 3.000 trabajadores que el pasado año produjeron 90.000 unidades, una cifra que este año será incrementada en un 15%. EFE
