En este quinto encuentro, se destacaron las soluciones innovadoras que las empresas españolas están implementando para hacer que los componentes estructurales de los vehículos sean más ligeros, seguros y sostenibles, y puedan suponer un contrapeso al aumento de las toneladas del vehículo a causa de las baterías. Esto es parte del quinto capítulo de la Agenda de Prioridades Estratégicas de I+D+i del Sector Automoción y Movilidad de M2F, que establece una hoja de ruta y las tecnologías facilitadoras necesarias para que España sea líder en el desarrollo y fabricación de piezas de carrocería y chasis para los vehículos del futuro.
Para esto, además, se destacó la necesaria colaboración público privada y Cecilia Medina, gerente de Innovación y Talento de Sernauto y coordinadora de M2F, señaló una serie de proyectos presentados en la segunda convocatoria del PERTE VEC relacionados con la investigación y desarrollo de nuevos materiales, componentes y estructuras; algunos de ellos aún están pendientes de ser aprobados o no, y podrían plantearse nuevos para la tercera edición.
A continuación, Katia de Luis, directora de Planificación Estratégica en Gestamp y coordinadora del área estratégica sobre Estructuras del vehículo, compartió los retos y tendencias que están influyendo en el desarrollo de componentes estructurales, como la mencionada electrificación, la circularidad, la sostenibilidad, los nuevos requisitos de seguridad y los modelos emergentes de uso y movilidad. Asimismo, subrayó que el objetivo de M2F es aligerar las estructuras, mejorar las prestaciones por motivos de seguridad y aumentar la sostenibilidad en productos y procesos de manera competitiva.
Por su parte, Maite Santos, directora de Mercado/Industria y Movilidad en Tecnalia, profundizó en el ecodiseño como un elemento fundamental en el desarrollo de nuevas estructuras, destacando el compromiso del sector con los Objetivos de Desarrollo Sostenible para minimizar el impacto ambiental en todo el ciclo de vida del producto. De igual forma, Ibón Ocaña, director de Desarrollo de Negocio Europeo en Ceit, habló sobre los nuevos materiales sostenibles utilizados en las estructuras del vehículo, como aceros de alta resistencia, materiales biobasados, polímeros y aluminios reciclados. Ocaña resaltó la importancia de las herramientas de simulación para conocer el comportamiento de estos nuevos materiales y reducir los procesos de prueba y error, así como el tiempo hasta su puesta en el mercado.
También se nombraron diversos proyectos sobre estructuras de vehículos que se están llevando a cabo actualmente. Un ejemplo es Ecovoss, que se centra en el desarrollo de nuevas soluciones de ecoestructuras multimaterial para vehículos sostenibles y cuenta con la participación de Gestamp Levante y Orbelan Plásticos, entre otras. Su objetivo es la reducción del peso del vehículo en un 20%, la disminución de los costes de fabricación y la mejora de las propiedades mecánicas de materiales y ensamblajes. Tres demostradores clave incluyen un anillo de puerta de acero y aluminio, un subchasis trasero de aluminio y un brazo de suspensión compuesto de acero y composite, utilizando tecnologías avanzadas de materiales y procesos de unión.
Otro proyecto relevante es el Lightraq, cuyo objetivo es desarrollar componentes estructurales ligeros y de alto rendimiento utilizando técnicas de fabricación aditiva y nuevos materiales compuestos. Empresas como Fagor Ederlan y CIE Automotive están trabajando en ello para mejorar la eficiencia energética y reducir las emisiones de CO2 de los vehículos.
El evento concluyó con una discusión sobre la necesidad de una estrategia nacional que incentive la tecnología y cree un contexto estable para atraer inversiones y fomentar la colaboración público-privada a lo largo de toda la cadena de valor. Cecilia Medina subrayó la fuerte Marca España en las estructuras del vehículo del futuro, enfatizando que las entidades de nuestro país ya están ofreciendo soluciones innovadoras que aumentarán la seguridad, sostenibilidad y competitividad de estas estructuras. Los expertos coincidieron en la necesidad de acelerar el proceso de I+D+i con el apoyo de las Administraciones Públicas para seguir ofreciendo valor añadido sin perder competitividad.