La adjudicación para España de la sede de la nueva unidad de negocio Horse del Grupo Renault, especializada en mecánicas de combustión e híbridas, corre serio riesgo de ser desestimada para en su lugar decidir ubicarla en Rumanía, el otro emplazamiento que optaba al proyecto, según han informado a La Tribuna de Automoción fuentes del sector conocedoras de los análisis del fabricante del rombo.
La elección de nuestro país, que, como adelantó este periódico en primicia en la edición de la primera quincena de enero de 2023, era una decisión en firme a falta de ser oficializada, ha quedado muy discutida en las últimas fechas dentro el proceso interno de evaluación que mantiene abierto el consorcio galo, debido a que el Gobierno español todavía no ha hecho un pronunciamiento en contra de la propuesta de la normativa de la Euro 7 de la Comisión Europea.
En caso de que saliera adelante el planteamiento de Bruselas afectaría sensiblemente al negocio futuro de la nueva división como a la actividad que desarrolla el fabricante en España, que con las plantas de Valladolid, Palencia y Sevilla se erige como el polo de hibridación global de la corporación gala.
En las últimas semanas, según ha podido saber La Tribuna de Automoción, la dirección de Renault España ha mantenido diferentes contactos y reuniones con representantes del Ministerio de Industria para tratar de garantizar el rechazo español a la Euro 7, algo que, de momento, ha sido infructuoso, pero que se considera fundamental para la adjudicación, máxime cuando nuestro país ostentará la presidencia de turno de la UE desde el 1 de julio en un semestre donde se tendría que resolver el devenir del estándar medioambiental.
A diferencia de nuestro Gobierno, el rumano ya ha confirmado que forma parte de la hasta ahora minoría de bloqueo de la legislación, en la que figuran Italia, Francia, República Checa, Portugal, Eslovaquia, Bulgaria, Polonia y Hungría, según ha informado Automotive News.
La decisión de la ubicación de la sede de Horse se va a resolver próximamente, entre finales de mayo y principios de junio, según fuentes del sector.
Muchas oportunidades para el país que albergue la sede de Horse
La nueva unidad de negocio, cuya propiedad se reparte en estos momentos al 50% entre el Grupo Renault y la china Geely —podría sumarse la petrolera saudí Aramco, con quien se ha firmado una carta de intenciones para que entre en el capital de la compañía—, controlará 17 fábricas y cinco centros de Investigación y Desarrollo con una plantilla de alrededor de 19.000 trabajadores —unos 3.400 de España—. Además, su facturación de partida, cuando eche a andar en julio, ascenderá a 15.000 millones de euros, con unas operaciones que se reparten en más de 130 países.
Todo ese potencial lo gestionará una dirección independiente desde una sede en Madrid, en las oficinas de la filial española en Alcobendas, como adelantó este medio, o en Rumanía, la casa de Dacia, una marca que tiene más recorrido con motorizaciones térmicas e híbridas que Renault —desde 2030 será 100% eléctrica en Europa—, enseña que se produce en nuestro país.
La importancia de ubicar el cuartel general de Horse reside, tal y como explicó, en un reciente encuentro con prensa en el que participó La Tribuna de Automoción, el director global de Estrategia del Grupo Renault, Josep María Recasens, en que se trata «de un órgano de influencia que puede atraer mucho al país, como centros de desarrollo y diferentes actividades de partners» del proyecto, en definitiva «muchas oportunidades más allá de localizar una oficinas para el equipo directivo».
