Ignacio Anasagasti / Pablo M. Ballesteros / Madrid
El Gobierno ha consignado en el Proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 un total de 67 millones de euros para actuaciones dirigidas a fomentar la movilidad sostenible, lo que supone un incremento de apenas 400.000 euros respecto a las cuentas aprobadas en los dos últimos ejercicios, según consta en los tomos presentados esta mañana en el Congreso de los Diputados.
La dotación presupuestaria mantiene el mismo esquema que en 2018 y 2017, es decir, se reparte entre la Dirección General de Industria y Pyme y el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), tal y como adelantó La Tribuna de Automoción el pasado viernes 11 de enero. De los 67 millones fijados, 17 corresponden al primer departamento, frente a los 16,6 millones presupuestados el curso precedente, y los 50 restantes, al segundo.
El montante que ha recaído en el Ministerio de Industria, para la puesta en marcha del Plan Movea 2019, está compartimentado como es habitual por destinatarios. Así, para las empresas privadas se reservan 8,94 millones, para familias e instituciones sin fines de lucro, 6,8 millones; para entidades locales, 1,1 millones; para comunidades autónomas, 80.000 euros; y para sociedades, entidades públicas empresariales, fundaciones y resto de entidades del sector público estatal, otros 80.000 euros.
A causa del alza de 400.000 euros presupuestado, el Gobierno prevé que se pueda apoyar a 4.500 vehículos de energías alternativas (eléctricos, pila de combustible GNC, GNL y GLP) o puntos de carga para coches eléctricos, frente a los 4.400 de las dos ediciones anteriores.
En lo referente a los fondos del IDAE, se expone que se destinarán "a actuaciones de apoyo a la movilidad energéticamente eficiente y sostenible". En 2017, los 50 millones fueron a parar a la activación de los planes Movalt Vehículos e Infraestructuras; mientras que la dotación de los PGE de 2018 está pendiente de consumirse; en estos momentos, el organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, está ultimando las bases de un nuevo programa de ayudas —se publicarán, previsiblemente, a finales de enero—, que contará con 60 millones de euros, los cuales se repartirán entre las autonomías en función de la población.
Para llegar a ese montante, el IDAE recuperó 10 millones que no gastó de la primera edición del Movalt, que iban a dedicarse a la línea de I+D (de los 15 millones que iba a contar, 5 millones se desviaron a Infraestructuras). Esta decisión se produjo después de que Hacienda desestimara la transferencia de los 16,6 millones de Industria, un hito que provocó que esta partida no se haya podido emplear en 2018.
La gran novedad en las cuentas de 2019 es que el Gobierno se ha comprometido a que del dinero extra que se recaude de subir en 3,8 céntimos el litro la fiscalidad al diésel —se estiman alrededor de 670 millones—, al menos un 30% se dedique, en 2020, a fomentar la movilidad sostenible para renovar el parque y para incentivar el transporte limpio entre las empresas. De este modo, podrían movilizarse unos 200 millones.