Pablo M. Ballesteros / Madrid
El secretario general de la patronal de dos ruedas de Anesdor, José María Riaño, ha pronosticado que el mercado de las dos ruedas crecerá un 5,1% en 2018, con la matriculación de 167.500 unidades, frente a las 159.372 de 2017, lo que reportó una caída del 6,9%, tal y como ya adelantó La Tribuna de Automoción.
En una rueda de prensa en la que hizo balance de la situación del sector, Riaño admitió que mientras que las motocicletas aumentarán sus operaciones en un 6,8%, los ciclomotores —que el año anterior crecieron un 31,8% por el hecho de que en enero de 2018 entró en vigor la normativa Euro 4, que encareció el precio de estos vehículos, por lo que se adelantaron operaciones para 2017— caerán un 5,4% con 21.500 unidades.
No obstante, dentro del segmento de las motocicletas, también hay que distinguir entre el comportamiento de las de igual o menor cilindrada de 125 cc, que cuentan con una previsión de crecimiento del 3,9% y las de más de 125 cc, con un incremento futurible del 10,2%. De hecho, ya en 2017 las de más de 125 crecieron un 1,4%, frente al retroceso del 20% de las más pequeñas.
A juicio de los responsables de Anesdor, esto se debe a que la entrada en vigor de la Euro 4 —en el caso de las motocicletas se aplicó un año antes, en enero de 2017— impactó más en las de menor cilindrada, porque es un segmento donde el cliente busca más el precio. Además, la mejora del entorno económico también ayudó a impulsar un segmento, pensado más para el ocio.
Pese a que la previsión para 2018 es de 76.000 motos de 125 y 70.000 de más cubitaje y a que han ido recortando distancia, puesto que antes las mayores representaban solo un 40% del mercado, desde la patronal del sector no creen que vaya a producirse un adelantamiento, porque los scooter son las que representan más potencial de mercado en el futuro y éstas suelen ser de 125 cc.
Políticas de circulación en los ayuntamientos
Precisamente, este porvenir más halagüeño se debe a que el scooter es la moto preferida de los que eligen las dos ruedas para desplazarse por las ciudades. En este sentido, Riaño se siente satisfecho con el trato que dan las alcaldesas de Madrid y de Barcelona a este sector, puesto que mientras el primer municipio ha excluido a las motocicletas y ciclomotores de los episodios de contaminación, Barcelona empleará las etiquetas de la DGT, después de que este organismo las implemente.
A juicio del secretario general de Anesdor, una vez que Tráfico cree los adhesivos será necesario esperar un tiempo, pero trascurrido este ínterin no ve con malos ojos que se utilicen en una ciudad como la barcelonesa donde el 25% del parque es de dos ruedas. No obstante, el portavoz del sector ha pedido “menos creatividad y más técnica” a estos ayuntamientos.
Para que las motos se conviertan, aún más, en un agente clave para la mejora de la calidad del aire, desde la asociación señalan que es necesario abordar una reforma fiscal, que prime la renovación del parque, puesto que la edad media en España es de 15,4 años, mientras que en Francia es de 10,6 y en Italia de 8,6.
Especialmente para las motos eléctricas, que el año pasado crecieron un 217%, con 4.345 unidades, pero tienen mayor potencial aún si se reduce el IVA para su compra o incluso se exime de su pago durante un periodo.
Por último, un aspecto que preocupa a Anesdor es el hecho de que la Comisión Europea haya propuesto 2020 como el año en el que entrará en vigor la normativa Euro 5 —para nuevas homologaciones, porque para el resto de vehículos será en 2021—. Sobre todo, porque no ha informado de qué parámetros se exigirán para entonces, lo que es muy complicado para la industria, puesto que las mejoras no se pueden implementar de la noche a la mañana y requieren una gran inversión en I+D.