Pablo M. Ballesteros / Madrid
Los trabajadores de Nissan Ávila han dado el visto bueno al preacuerdo firmado por UGT y USO con la dirección de la fábrica para reducir los costes operativos de la planta y garantizar el futuro. En el referéndum celebrado hoy en la planta abulense, 271 operarios han votado a favor (un 57,29% del total), mientras que 177 se han opuesto (37,42%), que era la opción que defendía CC.OO.
Según fuentes sindicales, el acuerdo supone la salida de 19 prejubilados, mayores de 55 años, que tendrán garantizado el 90% del salario bruto hasta los 63 años, más un complemento de 25.000 euros.
Éstos serán los únicos empleados que se irán de la fábrica, a pesar de que, en octubre de 2014, Nissan había puesto sobre la mesa la necesidad de despedir a 50 personas y subcontratar la actividad realizada por 80 más, ya que no eran centrales para la producción e incrementaban los costes en comparación con el salario que fija el convenio provincial.
Los despidos se han evitado gracias a la relocalización de la estampación de largueros que se utilizan para los bastidores de los camiones. Esta nueva actividad dará trabajo a 25 trabajadores, en un primer momento, ya que Nissan baraja la posibilidad de producir largueros para Iveco y para la fábrica de Mitsubishi en Portugal.
Además, del empleo que generará trasladar la fabricación de estos componentes que a día de hoy hace la empresa Emtisa en Sant Andreu de la Barca (Barcelona), supondrá una inversión de 2,5 millones de euros para Ávila. La producción comenzará entre febrero y marzo de 2016.
Congelación salarial y doble escala
Los trabajadores que queden en la fábrica tendrán que hacer sacrificios como trabajar dos días más al año, asumir una congelación salarial en 2015 y 2016, ver como se reducen sus pluses y renunciar a dos seguros médicos.
Además, se establece en Ávila una doble escala salarial indefinida que supondrá que las nuevas incorporaciones cobren un 20% menos que los compañeros de cadena, y tardarán cinco años en tener el salario completo (que será el 80% del sueldo actual).
En relación a los 11 trabajadores, que aún mantienen su vínculo con la empresa —de los 36 que abandonaron la factoría en 2010— con un acuerdo que garantizaba su reincorporación cuando hubiera trabajo, Nissan ha abierto la puerta a su regreso «en cuanto haya más carga», aunque lo harán con contratos de seis meses, y tras la segunda renovación se les haría indefinidos con las mismas condiciones que los trabajadores que ahora están en plantilla.
Asimismo, han planteado la posibilidad de que vuelvan los cuatro compañeros que están en Barcelona y otro que está en la fábrica de Cantabria. Por el contrario, los que hagan el camino Ávila-Barcelona, tendrán una ayuda de 500 euros al mes los primeros tres años, más 90 euros por cada miembro de la unidad familiar desplazado.