Ignacio Anasagasti / Pablo. M. Ballesteros /Madrid
El ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha declarado en el Congreso de los Diputados que el cierre anunciado de la fábrica de Yamaha en Barcelona tiene "muy difícil solución" y que hay "poco margen de maniobra", aunque todavía "no está decidido".
Durante su comparecencia en la Comisión de Industria, Sebastián recalcó que si su gabinete viera "alguna posiblidad" de hacer algo, ofrecería todo su "apoyo a la Generalitat de Cataluña" para tratar de evitar el cierre de la factoría o en su defecto reducir al máximo su impacto.
Asimismo, quiso subrayar que el Gobierno, dentro de sus competencias, "ha apoyado al sector de las dos ruedas", por ejemplo con la puesta en marcha del Plan Moto E de ayudas para la compra de ciclomotores y motocicletas.