latribunadeautomoción.es / Madrid
La dirección de la planta PSA Peugeot-Citroën de Vigo ha propuesto a los sindicatos un ERE de carácter temporal que afectaría a toda la plantilla sin distinciones, que podría darse a partir de marzo, y que se aplicaría a toda la plantilla ya que tal y como han declarado en este momento no se puede distinguir nominalmente a los operarios que resultarían afectados.
También han aclarado, que una vez se llegue a un acuerdo con el comité de empresa y con los sindicatos, el número de afectados se iría rebajando, y sólo perjudicará a los empleados del sistema M2 (2.800 trabajadores), que es donde se montan los monovolúmenes, sector donde se prevén más caídas.
Además de esta vía, la empresa baraja otras, como recurrir a bajar la cadencia del sistema M2 y promover los traslados internos a otras líneas de montaje. Desde la factoría viguesa es la única alternativa que se contempla teniendo en cuenta la caída de la producción en 2011.
Se estiman caídas en la producción de 2011
Desde los sindicatos, no se piensa en aceptar bajo ningún motivo un ERE que afecte a todos los trabajadores, Rubén Pérez, portavoz de UGT aboga por “seguir buscando soluciones organizativas” como dividir horas de trabajo entre las diferentes cadenas, puesto que en el sistema M1 hay empleados que trabajan también los fines de semana. Y han acusado a la firma francesa de llevarse la producción a otros países.
Feijoo por su parte ha expresado que desde la Xunta de Galicia se ha hecho todo lo posible por la fábrica, y que no pueden hacer más por los trabajadores de PSA Peugeot-Citroën.