El Tribunal de Gran Instancia de París autorizó al constructor automovilístico francés Renault a bautizar como Zoe a uno de sus vehículos, a pesar de ser el nombre que utilizan 35.000 ciudadanas en Francia.
El tribunal estimó que no había "ni daño inminente, ni ataque a la vida privada, ni ataque a la dignidad", informó Renault en un comunicado.
Dos familias con hijas llamadas Zoé, que ya han anunciado que apelarán la sentencia, habían llevado el caso a la justicia al entender que el fabricante no podía denominar a su vehículo con un ese nombre propio femenino.
Renault dijo estar "satisfecho" con la decisión del tribunal, que no encontró motivo para prohibir que el nuevo vehículo eléctrico de Renault se llame Zoe. EFE