Un total de 2.790 gasolineras francesas siguen sin carburante por las protestas contra la reforma de las pensiones, de un total de unas 12.500, según indicó el ministro de Ecología, Jean-Louis Borloo, quien destacó que ayer eran 3.181.
Borloo, en la sesión de control al Gobierno en el Senado, también indicó que continúan bloqueados 14 de los 93 depósitos de combustible del país, después de las operaciones policiales decretadas por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, para permitir la entrada de camiones que abastezcan las gasolineras.
El titular de Ecología señaló que esperan una mejora en la distribución de carburante “especialmente en las autopistas este fin de semana” cuando se prevé un incremento de los viajes por las vacaciones escolares de otoño que comienzan el sábado.
También avanzó que va a mejorar la situación de los ferrocarriles, y que mañana confía en que circulen un 80%, frente al 75% programado hoy por la compañía SNCF.
Borloo explicó que las 12 refinerías del país están paralizadas por las huelgas, algunas desde hace unos quince días, pero que a pesar de todo y gracias a las reservas estratégicas tienen “semanas y semanas de capacidades”.
A comienzos de semana, el número de gasolineras con problemas de abastecimiento superaba las 4.000 y todavía hoy en algunas regiones, como en las afueras de París, se forman colas de automovilistas que quieren llenar sus depósitos en las estaciones de servicio que permanecen abiertas. EFE