Stellantis ha comunicado oficialmente la adjudicación de la plataforma STLA Small a las plantas de Vigo y Zaragoza para fabricar coches del segmento B, una decisión que supone plasmar el compromiso de asignación incluido en los convenios colectivos de ambas factorías, que se firmaron, respectivamente, el 28 de noviembre y el 5 de mayo de 2023, según ha confirmado la compañía en una nota de prensa.
La elección de las fábricas españolas se debe a «su competitividad, saber hacer, clima social y el apoyo de las administraciones públicas», de acuerdo con el constructor.
Por otra parte, la automovilística asegura que el centro de Madrid «tendrá futuro más allá del actual Citroën C4, para lo que el grupo está trabajando en varios escenarios que se comunicarán a su debido tiempo». Esta apuesta de continuidad llega después de que este periódico publicase que el consorcio había descartado Villaverde para producir la siguiente generación de los modelos de la marca de los chrevrones que ensambla actualmente (C4 y C4x), al decidir su industrialización desde 2029 en Marruecos.
Stellantis no confirma aún las fechas de lanzamiento de los coches de Vigo y Zaragoza con la STLA Small
En el comunicado, en el que se especifica que la adjudicación a Vigo y Zaragoza de la STLA Small es «complementaria a la ya anunciada en diciembre de 2024 en Pomigliano (Italia)» para modelos del mismo segmento, el fabricante no detalla los vehículos que se harán en España bajo la nueva plataforma multienergía (admite mecánicas eléctricas e híbridas).
No obstante, tal y como ha venido informando esta publicación, se trataría en el caso de las instalaciones gallegas de la próxima generación del Peugeot 2008 —se produce en el Sistema 1, que será el que se adapte a la nueva arquitectura—; mientras que en las aragonesas los futuros Peugeot 208 y Opel Corsa, a los que se podría sumar el DS3, aunque las últimas informaciones apuntaban a que la corporación estaría analizando incluso si seguir comercializando la nueva edición.
Otro punto que quedaría por concretar, y que ha sufrido diferentes variaciones en el último año en las planificaciones internas, es la fecha de inicio de cada uno de los proyectos. En Vigo, La Tribuna de Automoción informó en octubre del año pasado que el arranque se había retrasado a septiembre de 2029, en comparación con el programa inicial que lo situaba en septiembre de 2027. Por su parte, en Zaragoza, este medio apuntó en noviembre de una demora de seis meses, con el 208 empezando después del verano de 2027 y unos seis o nueve meses más tarde el Corsa. El DS3 se barajaba para mayo de ese curso.
La STLA Small, directamente conectada a la gigafactoría de Zaragoza
Para ambos centros, los futuros automóviles electrificados contarán con las baterías producidas en la gigafactoría de Figueruelas que se está impulsando junto a la china CATL, y que se empezará a contruir en junio de 2025 para estar plenamente operativa en marzo de 2028 con la producción de celdas.
Respecto a Madrid, que había pujado por producir el Lancia Delta —se habría asignado a Pomigliano d' Arco—, este periódico informó que internamente se estaba analizando la posibilidad de que se convierta en una fábrica satélite de Zaragoza, de forma similar a Mangualde (Portugal) y Vigo, donde el centro portugués se dedica a montar las furgonetas de la familua K9 que también hacen en el gallego en el Sistema 2.
Para que esto sea posible, Villaverde tendría que contar con la nueva plataforma STLA Small. También, en el caso de que Leapmotor dé el visto bueno a la producción de sus coches en Figuruelas, las instalaciones madrileñas podrían aportar su capacidad si fuera necesario, aunque de esto no consta que se haya hecho ningún estudio por el momento.
Hereu ensalza el impacto de los Perte VEC
Tras la oficialización de la llegada de la plataforma a Vigo y Zaragoza y de la apuesta de futuro para Madrid, el ministro de Industria, Jordi Hereu, ha valorado «muy positivamente» el anuncio, toda vez que la decisión «garantiza la transformación y la continuidad de sus plantas en España».
Asimismo, ha destacado que «pone de manifiesto que España cuenta con centros de fabricación competitivos y refuerza nuestra posición como uno de los líderes mundiales en producción de vehículos», al tiempo que confirma que nuestro país «avanza adecuadamente para convertirse en el hub europeo de la movilidad eléctrica y conectada».
Para que las inversiones de Stellantis hayan sido posibles, Hereu ha recordado que el grupo ha obtenido «un total de 342,4 millones de euros de las distintas convocatorias del Perte VEC y Perte de Descarbonización. De esa cantidad, 139,5 millones van a parar a modernizar la cadena valor de las plantas», sentencia.