España cerró 2023 con 29.301 puntos de carga, a los que habría que sumar 7.728 que están instalados, pero pendientes de activar por algún trámite final, según el barómetro de Anfac, presentado por su director general, José López-Tafall. Al respecto, señaló que la evolución es positiva, con 11.173 unidades nuevas, pero muy por debajo de la media y de las exigencias europeas, según las cuales debería haber ya 45.063 conectores.
Sin embargo, el estudio de las marcas, a falta de que haya un informe público oficial y de que la asociación que aglutina toda la cadena de valor del VE Aedive presente el 20 de marzo su anuario, implica que en cuatro años la cifra de conectores se ha multiplicado por 3,3, puesto que en 2019 sólo había 8.800.
En 2024 se deberían doblar los puntos de carga
Por ello, el directivo afirmó que «un ciudadano que compre un vehículo eléctrico puede circular sin problemas porque hay puntos por toda España». No obstante, López-Tafall declaró que los cargadores deben ir por delante y, por ejemplo, solo el 5,2% son de alta potencia (igual o más de 150 kW), con un total de 1.525, según los datos de Ideauto.
A pesar de la evolución positiva, pero «no suficiente», las marcas de automoción estiman que este año debería acabar con 63.422 cargadores, lo que supondría doblar la cifra actual. Estos guarismos se deberían estirar hasta los 300.301 en 2030 y los 63.422 en 2035.
Dos modelos electrificados nuevos para las fábricas españolas
Además de los modelos enchufables que ya se ensamblan en las fábricas españolas —13 eléctricos puros y siete PHEV—, el director general de Anfac señaló que este año llegarán «otros dos», lo que demuestra que «la industria está creciendo de manera adecuada». En 2023, se produjeron 323.255 unidades con esta tecnología, un 13,2% del total.
También avanza su presencia en el parque automovilístico que de los 30 millones con los que cuenta en nuestro país, alrededor de 367.200 son eléctricos puros o enchufables (339.125, turismos; 26.390, comerciales ligeros; 1.093, autobuses y 592, industriales). En términos porcentuales un 0,6% correspondería a los primeros y el mismo ratio a los segundos. Los híbridos convencionales suman un 4%, mientras los diésel son un 34% y los gasolina un 60,3%.
2024 arranca flojo en electrificación
El objetivo que debería alcanzar el mercado nacional en 2024, a juicio de Anfac, es de 280.000 turismos, lo que supone una media de 23.300 unidades al mes (entre eléctricos y enchufables), cuando ahora estamos en el entorno de las 8.500, lo que dejaría un acumulado a diciembre de 139.836. Ya en 2023, los 113.784 automóviles enchufables se quedaron lejos de los 190.000 que estaban marcados. A ellos, hay que sumar 9.965, comerciales ligeros; 538, autobuses y 341, industriales.
Además, la cuota se sitúa en el 11,5%, cuando diciembre rondó el 15%, lo que hizo que «nos hiciéramos ilusiones». En cualquier caso, desde la asociación tienen claro que el peso de esta tecnología va a crecer al final del año, en comparación con el 12% de 2023. Este porcentaje, aunque fue positivo, se sitúa lejos de la media europea del 22,3%.
Por todo ello, López-Tafall que destacó en varias ocasiones que la evolución es positiva, pero no suficiente para lo que marcan los «exigentes» objetivos europeos, subrayó que hay que adoptar medidas para incentivar a las empresas. Al respecto, señaló que son estas las que aportan un 51,3% de las matriculaciones (un 41% de las matriculaciones totales), si se suman los eléctricos puros y los híbridos enchufables.
Por CCAA, casi el 50% de los turismos electrificados vendidos en España se registraron en la comunidad de Madrid, mientras que Navarra, Cataluña y Castilla-La Mancha son las regiones con mayor cuota de electrificados en sus mercados.
Sin noticias de la reforma del Moves
En relación al anuncio hecho por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el Foro anual de Anfac 2024, de que «en las próximas semanas» habrá reuniones para mejorar el Plan Moves de incentivos a la compra de vehículos enchufables e instalación de puntos de carga, López-Tafall aclaró que no hay ninguna reunión a la vista aunque pidió que se deje trabajar, porque aún hay margen.
En principio, según sus cálculos aún quedan unos 60 millones por repartir. De cara a un próximo plan, apostó porque más importante de que sea «mucho o poco dinero, que se lleve rápido» al comprador. No obstante, adujo que la cifra actual de 400 millones para cada ejercicio es un buen número y que sería positivo que fuera un plan a tres años vista. Es decir, en cuanto al presupuesto, los 1.200 millones para el periodo 2021-2023 del pasado plan le parecen correctos.
Industriales eléctricos, el gran debe
En los vehículos industriales, que empieza a haber más electrificados en segmentos ligeros y medios, el director general de Anfac criticó que muchas veces se quedan fuera de los análisis. Además, recordó que el Plan Moves para este tipo de transporte finaliza el 30 de abril.
Un sector que es esencial puesto que representa un 4,8% del PIB y 600.000 empleos, como recordó el líder de los fabricantes, que reivindicó que los transportistas, que se «enfrentan a un reto enorme con la descarbonización», «no se la pueden jugar».
Puntos de carga de 1.200 kW en 2027
Por ello, necesitarían que hubiera, ya en 2024, 327 cargadores de 350 kW y otros 327 de 800. En 2027, incluso, deberían llegar los de 1.200 kW, con una cifra de 109, dejando un total de 1.123 unidades de alta potencia.
En definitiva, el López-Tafall volvió a reivindicar que hace falta gobernanza para que haya infraestructura suficiente y que los vehículos eléctricos, de todas las tipologías, terminen de despegar en línea con los objetivos marcados por Europa. Esto será complicado sin «un centro de impulso y de monitorización de la recarga» en el seno del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
