El Ministerio de Industria ha publicado la primera resolución provisional de la sección B de cadena de valor del vehículo eléctrico del Perte VEC II en la que figuran 10 expedientes, entre ellos el de Mercedes-Benz España, a la que se han asignado 98,69 millones de euros en subvención y 30,94 millones en préstamos para «la transformación integral de la fábrica de Vitoria hacia una producción 100% eléctrica, sostenible y eficiente para vehículos privados y comerciales de alta gama», para lo cual ha validado un importe incentivable de 309,44 millones.
En una nota de prensa, se detalla que el dinero se destinará a implantar equipos innovadores para el montaje de los modelos cero emisiones —se fabricarán sobre la plataforma VAN.EA desde 2026— y también para el proceso de aplicación de pintura y recubrimiento de carrocería de estos monovolúmenes y el proceso de curado y sellado de sus nuevas carrocerías de aluminio y acero.
Aparte de la marca germana, otra enseña de coches que se ha visto beneficiada ha sido Nissan, que con su filial ibérica, se ha adjudicado 3,99 millones en ayudas no reembolsables y 1,67 millones en financiación para desarrollar «una nueva e innovadora plataforma adaptable y dedicada a vehículos eléctricos compactos y de segmentos B y C», que se producirían «a nivel europeo y global». Un proyecto, con un presupuesto financiable de 16,78 millones, que se impulsaría desde el Centro Técnico que la corporación nipona tiene en Barcelona (NTCE, en sus siglas en inglés).
Inyección adicional de 227 millones en la sección B del Perte VEC II
En la resolución, en la que por el momento no constan las solicitudes de Stellantis que se esperan para las arquitecturas STLA Small de los centros de Zaragoza y Vigo ni tampoco la de Ford para sus inversiones de electrificación en Almussafes, se han movilizado 127,71 millones en incentivos no retornables y 38,56 millones en créditos, sobre un total de presupuesto financiable de 412,10 millones.
Como novedad destacable, Industria informa que esta sección cuenta con una dotación mayor que los 559,67 millones aprobados inicialmente, ya que se han incorporado los fondos no consumidos de la línea A de baterías, hasta alcanzar 787 millones. De este total, 384.424.409,4 euros corresponden a subvenciones por 402.245.420 euros de financiación.
Irizar y Basquevolt
Más allá de las concesiones a Mercedes y Nissan, la segunda más cuantiosa después de la de la empresa germana es la de Irizar, con 13,03 millones y 0,92 millones, respectivamente, con el fin de «investigar nuevas tecnologías y materiales para que los autobuses eléctricos del futuro sean más sostenibles; nuevas plataformas de autobuses urbanos e interurbanos que maximicen eficiencia, autonomía y conectividad y para desarrollar la tecnología de una nueva generación de autobuses eléctricos interconectados para los trayectos interurbanos y autobuses urbanos con consumos más eficientes».
Seguidamente, se ha colocado Basquevolt, con dos expedientes, que contabilizan un respaldo de 10,4 millones para «investigar el desarrollo de las baterías del futuro, a través de un proyecto que permitirá investigar baterías con tecnología de estado sólido para vehículos eléctricos; y otro que desarrollará la digitalización inteligente de sus plantas para producir celdas y electrolitos para baterías».
En un escalón bastante inferior en adjudicación monetaria se encuentra el resto de corporaciones: Edscha Burgos (2,8 millones), Autotech Engineering (1,4 millones) —ambas propiedad de Gestamp—, Jema Energy (1,2 millones), Masats (705.707 euros) y Mugape (329.674 euros).
El Ministerió concreta que «en las próximas semanas se continuarán evaluando el resto de solicitudes presentadas». En total, se han registrado 138.