El cambio de paradigma hacia la movilidad eléctrica (además de la penetración más lenta de lo esperado que se está dando en este tipo de vehículos, especialmente tras la eliminación de las ayudas por parte del Ejecutivo germano) conlleva una serie de adaptaciones por parte de la industria, pasando incluso por el recorte de personal. Así ha justificado Continental su decisión de eliminar 7.150 puestos de trabajo, en un intento de disminuir costes dentro de su unidad automotriz y aumentar su competitividad.
De estos 7.150 despidos de Continental, 1.750 pertenecen al área de Investigación y Desarrollo (ContiTech), mientras que los restantes serán cargos administrativos; en total, se trata del 3,6% de su fuerza laboral global, de acuerdo con la propia empresa alemana, la cual ya adelantó en noviembre su intención de ahorrar 400 millones de euros al año a partir de 2025. También su CEO, Nikolai Setzer, dijo en septiembre que estaba considerando un cambio en la propiedad de la división ContiTech de la compañía.
El 40% de estos despidos tendrán lugar en el propio territorio germano (donde cuenta con 30 plantas) y el 60% restante se espera en los más de 200 emplazamientos que tiene en 57 países, en los que se reparten sus casi 203.600 empleados. Según Automotive News, un portavoz de la compañía dijo que 17 localizaciones en el área de Rin-Meno serán inspeccionados, además de algunas otras instalaciones.
También, adelantaron que bajarán sus inversiones en investigación del 12% al 9% de las ventas y revisarán posibles desinversiones en empresas conjuntas y asociaciones.
Acuerdo provisional
Por otra parte, en relación con pactos entre empresas, Schaeffler y Vitesco…
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