La dirección del Grupo Volkswagen está negociando con los representantes de los trabajadores en la matriz de Alemania un fuerte recorte de plantilla dentro de las medidas que implementará con el anunciado plan de ahorro de costes de 10.000 millones de euros entre 2024 y 2026, para poder asegurar sus inversiones en electrificación y conectividad e impulsar sus resultados financieros. Según han informado a La Tribuna de Automoción varias fuentes conocedoras de los detalles de las conversaciones, la reducción de efectivos podría rondar las 20.000 personas a lo largo de toda la estructura empresarial del consorcio en territorio germano.
Estas salidas progresivas en el tiempo, que representarán un ajuste del 6,8% del personal alemán —si se toma como referencia la cifra de cierre de 2022, cuando se contabilizaban 293.862 empleados—, en ningún caso se ejecutarán como despedidos, sino que la compañía, como concretó ayer el responsable de Recursos Humanos, Gunnar Kilian, en una reunión con el Comité en la sede en Wolfsburgo, aprovechará «la curva demográfica», de modo que se llevarán a cabo mediante acuerdos con prejubilaciones o jubilaciones parciales, así como con programas de bajas incentivadas, informa Reuters.
Las mismas fuentes explican a La Tribuna de Automoción que el grueso del recorte se hará en la matriz de Wolfsburgo, donde se ubica la principal fábrica, y también en las instalaciones de Audi en Ingolstadt, dos centros productivos cuyos ratios de trabajadores por volumen ensamblado están muy por encima que el resto de plantas del grupo. En el caso del resto de marcas y mercados, el impacto será muy pequeño.
El plan de salidas de Seat, como referencia
«Tenemos que ser suficientemente valientes y honestos para tirar por la borda las cosas que se están duplicando dentro de la empresa o que simplemente son un lastre que no necesitamos para lograr buenos resultados», subrayó Kilian.
En estos momentos, las negociaciones están en curso y, según indicó el presidente del Grupo VW, Oliver Blume, en una entrevista con el periódico alemán Frankfurter Allgemeine Zeitung, citada por Europa Press, están yendo «bien y de forma constructiva», en lo que apuntó como relevante que se estén poniendo encima de la mesa «instrumentos socialmente responsables».
Para abordar las salidas, la dirección del fabricante está analizando todas las posibilidades que le permite la legislación alemana. En este trabajo, incluso, ha contactado con la cúpula de Seat para ver los detalles del plan de salidas que se pactó en el último convenio colectivo 2022-2026, suscrito en julio del curso pasado. Este implicaba un programa de suspensiones voluntarias de contrato para trabajadores desde 61 años —se permite adhesión anticipada desde los 57 años—, con un potencial de bajas de 1.330.
El ajuste de plantilla se espera que se pueda consensuar antes de finales de 2023, cuando también se definirán el conjunto de medidas para implementar el objetivo de ahorro de 10.000 millones de euros hasta 2026
¿Sin cierres de fábricas del Grupo VW?
En la hoja de ruta de recorte de costes del Grupo VW, que afectará a todas las marcas, no se consideraría, en principio, el cierre de factorías, como dio a entender el CEO de la marca VW, Thomas Schäfer, en la reunión de ayer con el Comité, informa Bloomberg. «No estamos siendo suficientemente rentables con nuestros coches para financiar la transformación y nuestro futuro con recursos propios […]. Otros constructores cerrarían plantas en esta situación», remarcó.
No obstante, fuentes del sector apuntan a La Tribuna de Automoción que, dependiendo de cómo evolucione el contexto y los análisis del consorcio, se podría optar por clausurar algún centro productivo. Entre las opciones que estarían en la cuerda floja destaca la fábrica de Osnabrück en Baja Sajonia, que cuenta con alrededor de 970 operarios dedicados al montaje de coches, entre los que se encuentran los VW T-Roc Cabrio y Arteon Shooting Brake y los Porsche Cayman y Boxster.
Como primer frente de la estrategia de ahorro se coloca la marca VW, que, como reconoció Schäfer, «no es competitiva», a tenor de «muchas de sus estructuras existentes y altos costes». En este caso, la meta, con el desarrollo del plan Accelerate Forward | Road to 6.5, es pasar de su margen operativo del 3,4% en el tercer trimestre de 2023 a un 6,5% a finales de 2026, cosechando unas ganancias de 10.000 millones.
Primeros pasos del plan de ahorro en 2024
En la entrevista con el citado diario alemán, Blume comentó que «2024 será un ejercicio muy retador económicamente hablando», por lo que, «como pronto el año que viene planeamos conseguir un primer efecto de los más de 10.000 millones para el grupo a través de los programas de rendimiento de nuestras marcas».
«El objetivo es mantener estable el grupo, para que podamos arrancar desde 2025», apostilló, añadiendo que los logros que proyectan no se alcanzarán sin ajustes de plantilla. «Para incrementar nuestra eficiencia, hay que reducir el personal», puntualizó sin concretar el número de puestos que se verán afectados.
Con todas las medidas que se apliquen, el Grupo VW busca situar su margen operativo entre el 9% y el 11% en 2030.