El plan de la alemana es fusionarse con Vitesco para contar con su experiencia en el ámbito de la electrificación y lograr una mayor competitividad, tal y como reconoció el consejero delegado de Schaeffler, Klaus Rosenfeld ante los inversores.
Esta decisión viene motivada, además, por el declive en ventas del negocio de la combustión, el cual ya había provocado el recorte de 1.300 puestos de trabajo en 2022. La empresa combinada tendría al holding de la familia Schaeffler como accionista conjunto, contaría con 103 centros de producción y 33 centros de investigación y desarrollo y emplearía a más de 120.000 personas.
«Con la combinación de negocios, se creará una compañía líder en tecnología de movimiento con cuatro divisiones enfocadas e ingresos de aproximadamente 25.000 millones de euros», afirmó la empresa en un comunicado. Asimismo, según las previsiones de la compañía, la transacción podría generar 600 millones de euros en «sinergias de ventas y costes» para el año 2029.
De esta forma, podría consolidarse como competencia de ZF, Valeo, Robert Bosch y BorgWarner, con una cartera de pedidos de unos 40.000 millones de euros.
Por su parte, ante la propuesta de Schaeffler, desde el Comité Ejecutivo de Vitesco…
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