La Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin conductor (Feneval) prevé registrar una facturación cercana a los 1.800 millones de euros en 2023, resultados que se acercan a los obtenidos en 2019, antes de la pandemia del coronavirus, un ejercicio que batió récords con unos ingresos de 1.780 millones.
Esto supondría un crecimiento del 12,5% con respecto al 2022, cuando se registró una facturación aproximada de 1.600 millones. Asimismo, la entidad ha avisado de que, para el presente curso, se esperan cifras récord de turistas, sin embargo, creen que la prolongación de la carestía de vehículos, a causa de la falta de chips, hará difícil satisfacer esa demanda.
Es por este motivo que Feneval ha pedido a los fabricantes que mantengan su cuota de ventas del 20% a este canal en lugar de priorizar otros adquisidores, como los particulares. Cabe recordar que las alquiladoras pasaron de contar con más de 800.000 vehículos en circulación en temporada alta en 2019, a solo unos 600.000 el pasado verano.