La compañía tecnológica china Envision y la energética española Acciona han anunciado un proyecto de colaboración que supondrá la construcción de una nueva gigafactoría de baterías para vehículos eléctricos, que se ubicará en la localidad extremeña de Navalmoral de la Mata.
La implantación de la factoría, que fue avanzada ayer por el diario Hoy, forma parte de una iniciativa denominada Venergy+, que se ha postulado como beneficiaria del Perte del coche eléctrico y conectado, que hoy, tras dos ampliaciones de la ventanilla, ha cerrado el registro para presentar solicitudes. Esta agrupación empresarial integra a 12 compañías de 10 comunidades autónomas, que tienen previsto movilizar alrededor de 1.000 millones de euros, de los cuales 900 los asumirá la firma asiática para desarrollar el centro de producción, según ha concretado esta última en un comunicado. En materia de empleo, estas instalaciones conllevarán una contratación de 3.000 trabajadores cuando estén plenamente operativas en 2025.
La planta se ubicará en el polígono industrial ExpacioNavalmoral en unos terrenos de 200 hectáreas, de acuerdo con el periódico extremeño. Inicialmente, se contará con una capacidad de 10 GWh, que se podría ampliar, en dos fases, hasta 30 GWh en 2030. Una extensión que estaría sujeta al “crecimiento de la demanda”, en palabras de Envision. Si se acometiese, el desembolso podría elevarse hasta 2.500 millones de euros.
Las nuevas instalaciones, que representan la segunda gigafactoría que se ha previsto para España después de la del Grupo Volkswagen y Seat en Sagunto —estará operativa en el primer trimestre de 2026—, se encargarán del suministro de “celdas, módulos y paquetes de baterías de alto rendimiento con mayor autonomía y densidad energética” para diferentes plataformas de modelos cero emisiones, entre ellos “furgonetas y camiones pesados, un vehículo para entregas de última milla, tres modulares e innovadores y uno ligero de dos ruedas”.
Uno de los principales clientes que se beneficiará de los acumuladores de energía es Silence, el fabricante de motos eléctricas controlado por Acciona y que, a finales del presente ejercicio, va a iniciar un nuevo capítulo en su historia, el ensamblaje de un cuadriciclo en una parte de los terrenos de la Zona Franca de Barcelona que ocupaba Nissan. Esta marca equipa unas pilas que son extraíbles, una solución que facilita la gestión, por ejemplo, de flotas de movilidad compartida.
El futuro centro de producción de pilas, que generará 12.000 empleos indirectos, se alimentará con un 100% de energía verde suministrada por fuentes locales. Así, está previsto, por ejemplo, que Acciona instale en las cercanías una planta fotovoltaica.
Aparte de Envision y de la compañía energética, presente con su división de renovables y con Silence, el resto de socios que conforman la agrupación empresarial que va a concurrir al Perte son Teknia, el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG), Aresar, Liux, Qalma, Glavista, Cable Energía y Kapture.
De ellas, la primera tendrá el encargo de realizar las tareas de inyección de aluminio para las baterías en su factoría de Ampuero (Cantabria), según informan fuentes del proveedor, que añaden que el proyecto “encaja a la perfección” con la estrategia de la firma de ofrecer “soluciones de movilidad para todo tipo de vehículos”.
El presidente del Grupo Envisión en España, José Domínguez, ha declarado que su empresa “está muy agradecida al Gobierno y a la Junta de Extremadura por el nivel de apoyo que han mostrado para que lleguemos a este importante punto. Aplaudimos esta asociación estratégica duradera y nuestra ambición y cooperación compartidas, que perdurarán mientras desarrollemos juntos este proyecto y otros más”, sentenció.
