Las primeras palabras del CEO de Stellantis, Carlos Tavares, en la presentación de su plan de acción para la próxima década, Dare Forward 2030, fueron en apoyo de los 71 trabajadores del grupo en Ucrania de los que señaló que habían conseguido localizar a 68, pero que hay tres con los que no habían logrado comunicarse. En relación a la invasión de Rusia a su país vecino, el responsable portugués, además, aclaró que «aplicará las sanciones que se decidan».
Dentro de la hoja de ruta hacia la próxima década, destacó el deseo de convertirse en el primer grupo automovilístico libre de emisiones de cara al año 2038 en toda la cadena de valor del vehículo, lo que incluiría también a los fabricantes de componentes. Antes, en 2030, propone lograr una reducción del 50%, en comparación con 2021.
Antes de que concluya este decenio, el grupo se propone vender únicamente vehículos eléctricos en Europa, porcentaje que se reduce al 50% en el caso de Estados Unidos. En consecuencia, ampliarán su catálogo hasta los 75 automóviles impulsados únicamente por baterías, estimando que comercializarán anualmente un total de cinco millones de unidades con esta tecnología en todo el mundo para 2030, según la hoja de ruta presentada el 1 de marzo.
Doblar los ingresos netos
Además de la búsqueda de ser respetuosos con el planeta la iniciativa, que afecta a todos los departamentos de la empresa, les permitirá doblar sus ingresos netos hasta los 300.000 millones en 2030, manteniendo al mismo tiempo dobles dígitos en su margen operacional a lo largo de la década.
Para 2024, se marcan obtener el 100% de su objetivo de conseguir unas sinergias de la fusión de PSA y FCA de 5.000 millones de euros, después de haber alcanzado ya los 2.000 millones en este concepto. Adicionalmente, consideran que podrán conseguir más de 20.000 millones de free cash flow industrial, todo ello manteniendo el punto de equilibrio por debajo del 50% de entregas consolidadas.
Un 54% más de capacidad de producción de baterías
La apuesta por la electrificación conllevará tener que incrementar para 2030 la capacidad de producción de las baterías, en 140 Gwh, hasta los 400, un 53,84% más de lo previsto e introducir las pilas de combustible de hidrógeno en furgonetas de aquí a dos años, con vistas a extenderlas a camiones pesados en el futuro. Para ello, se creará el Stellantis Corporate Venture Fund, dotado con 300 millones de euros de presupuesto destinado a innovación tecnológica.
El evento sirvió de presentación al público del primer SUV de Jeep sin motor de combustión, que saldrá al mercado a principios del próximo ejercicio, seguida de la Ram ProMaster, también eléctrica. Además, se vislumbraron los primeros trazos de lo que será la camioneta Ram 1500, igualmente propulsada por baterías y que verá la luz en 2024.
El 25% de los ingresos ajenos a Europa y EEUU
Por otro lado, el plan contempla medidas por la igualdad de género como reservar un 35% de los puestos de liderazgo a mujeres —a pesar de que los cuatro directivos que presentaron el plan eran hombres—.
Finalmente, buscarán que el crecimiento de la empresa se extienda a todo el mundo, no solo a los mercados del continente europeo y Estados Unidos. El consorcio espera que la facturación en el resto de naciones les suponga más del 25% de sus ingresos netos totales.
El conglomerado cerró 2021 reportando un beneficio neto de 13.354 millones de euros, triplicando lo que generaron ambas empresas por separado en el ejercicio previo. El margen operativo alcanzó las dos cifras en ese mismo período, con un 11,8%.