China es una pieza clave en el mercado internacional de automoción. Es por esto que los constructores, aunque no alcancen los resultados deseados y se vean forzados a abandonar el ruedo, buscan la fórmula correcta para acceder a una porción de los 26 millones de compradores —la cifra estimada de matriculaciones para 2021, que puso fin a tres años de descensos consecutivos con un auge del 3%—. Un ejemplo es Stellantis, cuyo consejero delegado, Carlos Tavares, se ha fijado como objetivo reconquistar.
Pero también es el caso de Renault, que en 2020 puso fin a su joint-venture con Dongfeng en el país, enfocada en…
CONTENIDO EXCLUSIVO PARA SUSCRIPTORES
Accede al artículo completo adquiriendo la edición digital de La Tribuna de Automoción o suscríbete al periódico durante un año para tener acceso a todos los contenidos. Si ya eres suscriptor, utiliza tus claves para disfrutar de la mejor información del sector.