La fábrica de Stellantis en Madrid añadirá una nueva silueta a la producción del Citroën C4, ya que, a partir de mediados de enero de 2022, comenzará a fabricar la versión station wagon de este modelo, siempre que la escasez de semiconductores, que afecta a toda la automoción, lo permita. No obstante, de momento no ha supuesto ningún retraso, puesto que inicialmente ya estaba fijado que se lanzaría a finales de 2021 o principios del próximo ejercicio.
Según ha podido saber La Tribuna de Automoción, en el punto en el que sí ha afectado la crisis de los chips es en el de la previsión de producción, puesto que en un principio se había establecido que Villaverde alcanzaría las 600 unidades diarias con esta ‘adjudicación’, frente a las 444 que hace ahora —222 en cada uno de los turnos de ocho horas—, pero finalmente se va a mantener la cifra actual.
La planta madrileña, que ahora dirige Susana Remacha tras la salida de Eric Brochard, ha recibido alrededor de 240 empleados de la planta de Stellantis Zaragoza, según fuentes del sector, después de que esta suspendiera de manera indefinida el turno de noche del Opel Corsa.
A pesar de que la situación de este centro es mejor que la de otros del grupo en España, mantiene un ERTE abierto desde el 13 de abril al 31 de diciembre de 2021. El último día que paró por falta de piezas fue el 11 de octubre.
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