La dirección de la fábrica de Mercedes en Vitoria ha anunciado al Comité de Empresa esta mañana que ha actualizado al alza el programa de producción anual en 8.600 unidades, hasta las 148.600, un incremento de pedidos que corresponde, fundamentalmente, con el modelo Vito de combustión, según informa en un comunicado UGT.
Este aumento es el segundo en 2021, después de que en enero se ampliase el volumen previsto para el año en 8.500 furgonetas, lo que conllevó fijar como laborables los sábados de febrero y marzo. Esta variación supuso toda una sorpresa porque llegó apenas unos días después de que la planta, cuando arrancó la actividad tras las vacaciones de navidades el 4 de enero, empezase a operar con uno de los tres turnos de trabajo a la mitad, un ajuste que supuso la salida de alrededor de 350 empleados temporales y que, en principio, al comunicarse en octubre de 2020, se iba a extender al menos durante todo el primer trimestre.
Con la nueva proyección productiva, la dirección, que ha trasladado que la semana que viene no tendrán que hacerse paradas por falta de chips, ha precisado que la recuperación del tercer equipo al completo llegará el próximo 7 de junio, con una continuidad previsible de todo el ejercicio. A causa de ello, se contratarán, de nuevo, alrededor de 400 extrabajadores del centro.
Asimismo, se espera, en función del suministro de piezas, que sea necesario activar los sábados de julio y que se trabaje la última semana de agosto en Mercedes Vitoria, lo cual significará la entrada de más de 300 efectivos temporales para que la plantilla puede disfrutar de esos días de vacaciones que no tendrán consecutivamente, que se podrán coger entre el 5 de julio y el 17 de septiembre.
Frente a este par de decisiones, UGT ha pedido a la empresa que las reconsidere, ya que no sería necesario llevarlas a cabo si se adelanta la fecha de recuperación de la normalidad en el tercer turno a mayo, tal y como estaba previsto inicialmente.