1000 CV de potencia, de 0 a 100 en 2,5 segundos… Y se recarga en casa. Así es el nuevo modelo que ha presentado la Scuderia Ferrari, el SF90 Stradale, que se convierte en el primer híbrido enchufable de la historia de la marca en el año en que esta celebra su 90 aniversario.
Según aseguran desde Maranello, el modelo “ofrece un rendimiento sin precedentes para un automóvil de producción”, ya que su motor V8 turbo de 90º tiene la potencia más alta que hayan fabricado para esta especificación, 780 CV (800 Nm de par) solamente de combustión.
A ellos, se suman los 220 CV que aportan tres motores eléctricos: el primero en el eje trasero, con un diseño derivado del MGUK (unidad de potencia) que monta el monoplaza de Fórmula 1 del cavallino rampante; y los otros dos se colocarían en la parte delantera del deportivo, uno por rueda.
Sin embargo, desde la firma italiana argumentan que, pese a lo sofisticado del nuevo conjunto mecánico —que puede pasar de 0 a 200 km/h en 6,7 segundos—, la experiencia de manejo será extremadamente sencilla: “El conductor simplemente ha de seleccionar uno de los cuatro modos de la unidad de potencia, y concentrarse en la carretera”.
Más innovador aún es el nuevo sistema aerodinámico que incorpora, ubicado en la parte trasera y que regula el flujo de aire sobre la parte superior del SF90. Así, se logra reducir la resistencia del aire a altas velocidades, y aumentar la fuerza de agarre en las curvas y durante los cambios bruscos de dirección.
Y si el hecho de ser el primer Ferrari híbrido no era suficiente, también será pionero en contar con tracción total a las cuatro ruedas, un “paso imprescindible”, según la entidad: “Equiparlo con 4WD es necesario para permitir que la increíble potencia liberada por el propulsor combinado se aproveche al máximo”.