Ignacio Anasagasti / Madrid
La palabra que mejor define la actual situación que predomina en el mundo de la movilidad es incertidumbre. Cada vez que un cliente particular o una empresa decide renovar su coche o comprarse otro más su elección está plagada de dudas, debido las restricciones a la circulación que se están aplicando en las ciudades, pero, sobre todo, por la inexistencia de un horizonte cierto y estable en relación a la regulación del transporte en la Unión Europea.
Para hacer frente a este escenario y para tratar de aportar algo de luz, el operador de renting ALD Automotive y Nissan, en colaboración con la consultora Grant Thornton, han creado la denominada Mesa de la Movilidad Inteligente como Servicio (MMIcS). Se trata de una serie de reuniones de trabajo lideradas por estos agentes empresariales y en las que participarán compañías de diferentes sectores de actividad e instituciones o administraciones públicas, en las que se analizarán las nuevas tendencias de movilidad que afectan al mundo corporativo. Todo ello con el objetivo de anticipar soluciones a problemas concretos, encontrar sinergias para potenciar la eficiencia del transporte de personas y mercancías y dibujar el futuro inmediato.
La presentación oficial de este foro tuvo lugar el 7 de noviembre en Madrid, con la presencia del director general de ALD Automotive, Pedro Malla, el director Comercial de Nissan, Christian Costaganna, y la socia encargada del área de Automoción y Movilidad de la consultora, Mar García Ramos. Hasta esa fecha, y desde que se puso en marcha la iniciativa seis meses antes, ya se habían celebrado dos encuentros con la participación de entidades como Bipi, Bosch, DGT, CDTI, Endesa, Fundación Mapfre, GSK, Grupo IFA, Neo, Pascual, Telefónica o Tüv Süd.
Los planes iniciales pasan por que en los próximos tres meses se desarrollen nuevos debates —después de cada sesión se elabora un dossier con conclusiones—, tras los cuales se realizará una labor de análisis y síntesis para preparar “al cabo de un año” una suerte de libro blanco, que será expuesto en una jornada pública, según explicó García Ramos. No obstante, Malla matizó que la mesa no tendría que poner punto y final a su existencia en ese momento, sino que podría continuar sine die, porque la materia de la que se habla “está cambiando mucho y rápidamente”.
Carsharing y eléctricos
Dos de los puntos centrales de la nueva movilidad son la economía colaborativa y la electrificación. Sobre el primero, el responsable de ALD comentó que es necesario “una gestión del cambio en los dirigentes de las compañías, en los usuarios, en las administraciones públicas y en la sociedad en general”, porque “deben entender la maximización de oportunidades que lleva consigo conectar sectores”. Según Malla, la demanda de estos servicios entre las compañías “es cada vez mayor” en nuestro país y la apuesta que va a hacer su operador, que la van a presentar próximamente, consistirá en una plataforma de carsharing corporativo, de la que ya se han hecho test en Italia.
Incidiendo en este tema, la directora de Operaciones de ALD, Clara Santos, explicó que este negocio tiene potencial porque, como las empresas no pueden ofrecer coche a todos sus empleados, poner en marcha un servicio de vehículos compartidos para la plantilla es una forma de llegar a todos.
En cuanto a la electromovilidad, el director comercial de Nissan apuntó que esta alternativa es interesante para los clientes profesionales. En el caso de que existan incentivos públicos, indicó que los eléctricos “son más competitivos en costes que los modelos de combustión”, un balance que sucede incluso sin ayudas, por ejemplo, “en taxis en los que se hace un uso intensivo”. Para acelerar la presencia de esta tecnología, Costaganna, que defendió igualmente una armonización legislativa para empresas y particulares en materia de movilidad, precisó que se requieren apoyos “continuos y más sencillos”.
El directivo de la marca japonesa, a preguntas de este medio, también concretó los planes que manejan en relación a servicios de carsharing en España. Éstos pasan por el desarrollo de este negocio a través de su red de concesionarios para ofrecerlo localmente a empresas e instituciones “a través de un pool de coches”, que estaría disponible en cada instalación.
