Pablo M. Ballesteros / Ignacio Anasagasti / Tarragona
El precio del gas natural comprimido (GNC), que se emplea para la automoción, presenta una desviación de hasta un 36,76%, en función de la estación de servicio en la que se reposte, según ha podido constatar La Tribuna de Automoción, después de realizar un estudio de mercado representativo de las 57 gasineras públicas que hay en España.
Esta publicación ha podido detectar que las más costosas son las de Gas Natural Fenosa, en las que el kilo GNC ronda el euro —por ejemplo, en Alcorcón 1,012 euros—, mientras que las más baratas son las 12 de Ham, donde el precio es de 76 céntimos, menos en Abrera (Barcelona), donde es de 0,74 céntimos.
En consecuencia, entre Alcorcón y Abrera, hay una diferencia de 27,2 céntimos o lo que es lo mismo un sobrecoste de un 36,7%, aunque no es en las únicas estaciones de servicio en las que hay grandes variaciones. Por ejemplo, en todas las gasolineras de Repsol en las que se dispensa GNC el precio es de 0,839 euros, aunque la compañía no ha aclarado por qué en todos los centros mantiene el mismo precio.
Fuentes de Gas Natural Fenosa, consultadas por La Tribuna de Automoción, aclaran que el motivo por el que es más caro repostar en uno de sus surtidores es porque ellos han elegido núcleos urbanos para sus establecimientos, lo que encarece el precio del suelo. También se debe a que donde es más barato, en gran parte, es porque hay mucha afluencia de camiones (aunque estos repostan otra variante de gas natural, como lo es el líquido GNL), por lo que al haber más actividad no es necesario buscar el margen en cada operación, según justifican.
Asimismo, estas fuentes señalan que la compañía busca que las gasineras sean rentables en sí mismas y desde el principio, para poder hacer un desarrollo rápido de infraestructura y también instalarlas en capitales menores. No obstante, desde Gas Natural Fenosa señalan que el ahorro del GNC, frente a la gasolina es de un 50%, como mínimo, puesto que al hecho de que el kilo de gas es más barato que el litro de bencina, hay que sumarle que tiene más poder calorífico.
Por su parte, desde Ham, la empresa propietaria de las estaciones de servicio donde es más barato repostar, señalan que realizan “un esfuerzo muy importante ajustando al máximo sus precios de venta en surtidor, con el fin de ayudar a los clientes a adherirse al uno de este combustible”.
El precio más caro Gas Natural Fenosa lo compensa, en parte, porque ofrece una tarjeta gratuita de fidelización con la que devuelven el 30% del importe del repostaje al cliente, hasta un límite total de 200 euros y un máximo de un año para acumular descuentos. No obstante, desde esta empresa señalan que no es el motivo por el precio inicial es más alto.
Una séptima parte del impuesto de la gasolina
Uno de los motivos por los que el GNC es mucho más barato que la gasolina y que el gasóleo es por los impuestos. Mientras que el cliente de gas natural abona 0,061 euros por kilo, en concepto de impuestos especiales, el litro de gasolina se grava a 0,42 euros —siete veces más— y el del diésel 0,33, según fuentes de la Agencia Tributaria.
Además, hay que sumarla otros impuestos que fijan las comunidades autónomas y que el gas no recibe. Por último, en ambos casos, se le aplica un IVA de un 21%.
Si se toma como base un kilo de GNC que cueste un euro, el coste neto es de 0,765 euros, el impuesto especial (que es igual con independencia del precio del combustible, es de 1,15 euros por giga julio) es de 0,061 euros, más los 0,174 euros del IVA, según la patronal del gas natural vehicular, Gasnam.
La Tribuna de Automoción ha comprobado, sobre el terreno, el hecho de que los vehículos de GNC tienen un consumo más económico. Con un Seat León 1.4 de 110 CV fue posible recorrer 377 kilómetros, la mayoría de ellos por vías interurbanas, con un vehículo conducido de forma convencional. Abordo viajaban tres personas y sus respectivos equipajes.